El mes de abril pasado marcó un punto histórico en la industria automotriz mexicana con la entrada de la china MG entre las 10 marcas de mayor venta en el país. Con poco más de un año en México, su velocidad de crecimiento es tan espectacular como la del Maglev, el tren eléctrico que flota sobre los rieles y viaja entre el aeropuerto de Pudong y el centro de Shanghai a más de 400 km/h. Ya son más de 10 mil los mexicanos que tienen un auto de la marca británica, parte del conglomerado chino SAIC, que engloba alianzas con marcas como Volkswagen y General Motors. A pesar de la resistencia de muchos, los chinos seguirán aumentando su participación de mercado en nuestro país, por lo que es importante entender mejor cada marca y su momento.
Sí, estar en el “top ten” de ventas es probablemente una coincidencia para MG en México, debido a la escasez de productos que viven marcas como Honda y Mazda. Sin embargo, es algo a lo que nos debemos acostumbrar porque será más y más común en el futuro. Los chinos producen automóviles que satisfacen gustos, necesidades y, principalmente, encajan en la capacidad adquisitiva del consumidor mexicano. Aún pagando un arancel de 20% para los productos importados de ese país, logran poner precios extremadamente competitivos y conquistar con eso a muchos clientes para sus filas. Además, los fabricantes chinos de autos han sorteado mucho mejor la crisis de semiconductores que aún se vive en la industria, ofreciendo productos de entrega inmediata o con listas de espera menores. En 2021 el mercado chino vendió impresionantes 21 millones de vehículos, que si bien es una caída fuerte comparada a los 24.3 millones de 2017, sigue siendo el mayor mercado del mundo por buen margen. Dentro de ese inmenso pastel asiático, las marcas locales crecieron 24.5% el año pasado, mientras que las extranjeras bajaron 5.7%, según números de Carsalesbases.com. Los chinos ya tienen más de 45% de su propio mercado y entre sus marcas la líder es Geely (dueña de Volvo), que sin embargo ha perdido espacio y ve su cuarto lugar general (debajo de VW, Toyota y Honda) amenazado por la que era líder hasta 2016: Changan.
Al alza y a la baja
Changan, que ya está en México, opera a través de un importador, el Grupo Picacho de distribuidores, que creó Motornation para la venta en conjunto de los vehículos de esta marca y de BAIC, que ya tiene más tiempo en el mercado mexicano. Con un poder de crecimiento de red y alcance publicitario menor que el de otras marcas como MG o JAC, Changan y BAIC crecen a un ritmo más lento, pero van abriendo también su mercado y ayudando a quitar de la mente de muchos la idea de que los autos de origen chino tienen baja calidad.
En otros países de América Latina donde los chinos ya tienen más tiempo en el mercado, como Brasil, donde se encuentran desde hace 15 años, la marca Chery ya quedó en el décimo lugar en ventas en 2021, por arriba de muchas con más abolengo. En Argentina quedó en el lugar 14 y en Chile está en el número cinco. Chery llega a México en este mes de junio próximo y se llamará Chirey, ya que pretenden entrar también en Estados Unidos y quieren que la pronunciación de su nombre sea igual en toda Norteamérica.
Para los que aún desconfían de sus productos, un estudio de Calidad Inicial de JD Power publicado en octubre pasado sobre el mercado chino, pone en primer lugar a GAC Honda (una alianza entre la china Guangqi y la nipona Honda), a GAC FCA Jeep en segundo y a Changan en séptimo.
La seguridad, que era mala hace 15 años, aumentó al punto de que hoy vemos vehículos como el Link & Co 01 en primer lugar en EuroNCAP, con 5 estrellas y 96% de aprobación, por arriba de autos como el VW ID4 y el Audi Q4 e-Tron. La SUV eléctrica NIO ES8 también logró 5 estrellas en el exigente instituto europeo.
El hecho es que en valor por tu dinero es muy difícil vencer a los chinos en este momento, como lo fue en los dos primeros años de entrada de los coreanos, especialmente de Kia. Y si hace 10 años nadie pensaba tener un auto coreano y mucho menos uno chino, en 2032 será difícil encontrar a alguien que no haya tenido al menos uno