La firma oriunda de Hiroshima, luego de 16 años en México se ha consolidado como una de las marcas protagonistas en nuestra industria automotriz, quizá no tanto por volumen como por posicionamiento e imagen.
A que me refiero, Mazda es una marca muy bien percibida en nuestro país, podríamos decir aspiracional, y si bien esto ha propiciado todo tipo de controversia, sobre si es premium o no lo es y mil cosas más. Lo cierto es que sus productos con diseño atractivo, sus características de manejo y buen servicio, le han permitido conseguir una posición de privilegio. Y es que resultan atractivos tanto a la gente joven que quiere un auto con mucho estilo, a entusiastas, pero también a compradores maduros y racionales que buscan sofisticación, lujo y confort.
Es así que un estudiante puede tener en la mente un Mazda3 hatchback, mientras que una mujer con familia puede estar buscando una CX-9, y el entusiasta un MX-5. Créeme cuando te digo que lograr eso en espectros tan dispares del mercado no es tarea fácil.
¿Premium de volumen?
En palabras de Miguel Barbeyto, presidente de Mazda en México, la marca NO ES PREMIUM, pero han venido haciendo esfuerzos para transitar hacia allá, sin embargo, la estrategia ahora es convertirse en la primera marca premium pero de volumen. Y esto significa que quieren duplicar sus ventas y apuntar a una participación de mercado entre el 9 y 10%. Actualmente tienen un share del 4.6% al haber vendido 46,901 unidades en 2021.
Lo anterior en sentido estricto es una contradicción, si eres de volumen automáticamente no eres premium y viceversa, o tradicionalmente es así. Aun así, hemos sido testigos como BMW, Mercedes y Audi han ido buscando ampliar su presencia más y más en los segmentos de entrada durante años. Es decir, la idea de Mazda tampoco está para nada errada.
De acuerdo con Barbeyto, Mazda tiene un posicionamiento sólido y es momento de buscar más volumen, pero ello no quiere decir que la firma esté pensando en ofrecer vehículos mal equipados, bajar la calidad o recurrir a las flotillas. Esa no es la intención, sin embargo, sí saben que conforme fueron subiendo los precios en los últimos años, fueron perdiendo clientes que querían tener un Mazda, pero ya no les alcanzaba.
Para ellos Mazda ofrecerá nuevas versiones cuidadosamente configuradas, que tengan un precio más accesible pero sin sacrificar aspectos importantes como la seguridad. Y esto debiera ser un círculo virtuoso, si se le demanda más volumen a la planta de Salamanca, las economías de escala permiten que los costos bajen y que en consecuencia, la marca podrá ofrecer sus productos a mejor precio.
La base de esta estrategia es ampliar la disponibilidad de opciones en: Mazda2, Mazda2 Sedán, Mazda3, Mazda3 Sedán y CX-30. Dejo para el último la CX-3 porque había que mencionar que se empezará a fabricar en nuestro país en breve, con lo cual también podrá funcionar bajo esta nueva estrategia.
Adicionalmente, está CX-5, que participa en una categoría importantísima y que también está considerada.
Y lo anterior más que agregar complejidad en el área de ventas, en donde tienen confianza en su red de distribución, representa un reto enorme para la postventa y es que nada tiene que ver recibir 30 mil órdenes de servicio al mes, que recibir 70 mil. Entonces, la red tendrá que crecer, los talleres y centros de colisión también, así como la cantidad de asesores y equipo. Como sea, Barbeyto sabe que para que esto funcione, no se pueden dar el lujo de caer en el nivel de servicio, o todo el plan fracasaría.
Los nuevos modelos
Pero para crecer así como lo tienen planeado, van a necesitar más modelos, ahí entran en la ecuación 3 nuevas SUV.
La primera, se trata de la CX-50 que llegará a nuestro país este año, es un SUV del segmento C que coexistirá con CX-5, aunque es un poco más grande y tiene un enfoque más aventurero, tendrá un posicionamiento ligeramente distinto. Vaya, va a funcionar como lo hacen Escape y Bronco Sport en Ford.
Para el año que viene, en el segundo trimestre también veremos la llegada de la nueva CX-90, modelo que reemplazará a la ya veterana CX-9. Esta nueva SUV también de 3 filas de asientos empleará la arquitectura de motor longitudinal y tracción posterior (también puede ser AWD) recientemente anunciada y también tendrá variante plug-in hybrid, aunque habrá que esperar a esperar la configuración específica para nuestro mercado, si piensan traer al menos una versión híbrida.
Por último, CX-70 que está planeada para la segunda mitad del año que viene, muy parecida a la CX-60 que se presentó recientemente, pero será algo más larga y ancha, aunque quedará por debajo de CX-90 y evidentemente también empleará la mencionada nueva arquitectura.
¿Qué hay de la pick up BT-50?
Tampoco es nuevo para nadie la importancia que tienen las pick ups en México y Mazda tiene una opción en el segmento de las medianas (ahí donde compiten Frontier, Hilux, Ranger, etc), que es el más grande.
Se llama BT-50 y en el pasado estuvo basada en la Ford Ranger, sin embargo para la actual generación la marca se alió con Isuzu y pudiera ser una opción atractiva de cara a incrementar el volumen.
En ese sentido Barbeyto comentó “La BT-50 puede jugar en el portafolio y por supuesto que la tenemos en el radar, pero no la vamos a lanzar en este momento”
