Tras nueve años de espera, Mazda cuenta al fin con una totalmente nueva BT-50. Y en esta ocasión realmente es "totalmente nueva", ya que acaba la firma de Hiroshima acaba para siempre con la colaboración con Ford y la Ranger que data de 2006, para iniciar una nueva era con Isuzu y la D-Max.
Esta tercera generación de la Mazda BT-50 se produce en Tailandia, en las instalaciones de Isuzu, pero fue presentada mundialmente en Australia, quizá el mayor mercado global para pickups medianas (o uno de los tres principales). Por ahora arriba exclusivamente con carrocería de doble cabina, pero no se descarta que asome a futuro una variante de cabina simple.
Como ya hemos explicado antes, la BT-50 toma como base la nueva generación de la Isuzu D-Max lanzada recién en 2019. Mide 5,280 mm de largo, 1,870 mm de ancho, 1,790 mm de alto y tiene 3,125 mm entre los ejes. Si la comparamos con la saliente BT-50, es 9 cm más corta, 2 cm más ancha, 3 cm más alta y tiene una distancia entre ejes 9 cm más corta.
Mazda informa una capacidad de carga de 1,065 kilos y la opción de remolcar hasta 3,500 kilos, cifras similares a los de la BT-50 de segunda generación. Asimismo, cuenta con 1,114 litros de volúmen de carga en el pick-up.
El motor es nuevo para la marca. Por ahora se ofrece con un cuatro cilindros de tres litros turbodiésel, que eroga 190 Hp a 3,600 rpm y 332 lb-pie de torque. El propulsor está asociado a cajas manual y automática de seis, y con tracción trasera o 4x4. La marca indica que este nuevo propulsor es mucho más eficiente en consumo de combustible. Más adelante debería sumarse el segundo propulsor que Isuzu tiene para la D-Max: un 1.9 litros turbodiésel de cuatro cilindros que entrega 150 Hp y 258 lb-pie.
Estilo Kodo
Lo más llamativo de la nueva BT-50 es la forma en que Mazda incorporó el diseño Kodo, que es posible ver en todos sus modelos, con las proporciones musculosas de una pick-up.
La parte delantera luce el aspecto familiar de toda la familia Mazda, con la misma combinación de parrilla heptagonal y faros esculpidos que hemos visto en varios SUV, unidos por las gruesas alas tridimensionales cromadas por debajo. Es una estética limpia que nos recuerda a la CX-9.
El perfil es más tradicional en una pickup, y claro, es poco lo que se puede hacer aquí. En la trasera es más tradicional aún, con el logo Mazda puesto debajo de la manija del portón y unas calaveras de tres niveles dispuestas en forma vertical.
Siguiendo el camino trazado por Mazda en sus vehículos, el interior de la BT-50 es posiblemente uno de los más lujosos que encontrarás en una pickup mediana. Las fotos nos muestran una apariencia oscura y minimalista, materiales buenos al tacto y una disposición centrada en el conductor.
El volante es familiar en la marca, pero no así la pantalla táctil de gran tamaño, que está puesta en el centro del tablero. Como ya es norma, tiene conectividad bluetooth, y a las aplicaciones vía Apple CarPlay y Android Auto.
Al menos en Australia se ofrecerá con abundante equipamiento: climatizador bizona, sistema keyless con botón de encendido, sensores de proximidad con cámara de reversa, control crucero adaptativo, freno automático de emergencia, asistente de mantenimiento de carril, sensor de punto ciego, alerta de tráfico cruzado.
La nueva BT-50 se pondrá a la venta en Australia en los próximos meses, iniciando luego la internacionalización hacia otros mercados asiáticos y de Latinoamérica ¿México? olvídate, ya que la marca ha sido enfática en decir que no llega a nuestro país.
Presentación Mazda BT-50 2021