Isuzu reveló hace unos días atrás a la nueva generación de su camioneta estrella, la Dmax, modelo que, en su país de origen, es una camioneta muy popular. Esta nueva octava generación no comparte desarrollo o mejoras con ningún producto de General Motors. Esto es importante de señalar, considerando que Isuzu y Chevrolet tienen un lazo muy fuerte de cooperación y que data de la década de los ochenta, teniendo en la antigua LUV el mejor ejemplo.
Aunque Isuzu habla sobre una nueva generación, poco se ha mencionado sobre si es exactamente una plataforma nueva o una fuerte evolución de la plataforma actual. De hecho, la matriz de las puertas y el cofre, así como las siluetas de las ventanas, son bastante parecidas a las del modelo saliente. Ahora, los estampados, los pliegues en el techo y en las puertas son distintos. Para que hablar del frontal, a primera vista tiene un look muchísimo más agresivo, que contempla una generosa parrilla y unas aplicaciones que parecen colmillos de araña, flanqueados por dos faros de mirada agresiva. La trasera destaca por un conjunto óptico prominente. D-max 2020 se ofrecerá en dos niveles de altura y los modelos "lo-ride" llevaran una defensa frontal ligeramente rediseñada en la parte inferior.
Isuzu atacó muchos puntos cruciales en la fabricación de esta camioneta, de modo así poder mantenerla vigente por mucho tiempo, considerando los cambios que se avecinan en los próximos años en materia de conectividad, seguridad, asistencias de manejo y más. Por ejemplo, la arquitectura eléctrica del auto es completamente nueva y pensada en la flexibilidad, así se podrá actualizar para incorporar más elementos de seguridad de los que ya equipa (en versiones tope de gama), como alerta de tráfico cruzado, monitor de punto ciego, encendido automático de luces, encendido remoto y más.
El chasis fue fabricado con aceros de alta tensión, superiores a 390 MPa (pasando de un 30% a un 46% de uso) y alcanzando los 980 MPa en las zonas más críticas, lo que significa un aumento de la rigidez en un 20%. Como ahora Dmax puede vadear hasta 800 mm, Isuzu ha puesto especial cuidado en el tratamiento anti corrosión empleado, considerando que, en Tailandia, el agua y la humedad es una constante.
Hacia el interior, el salto en diseño es sustancioso, incluyendo pantallas multimedia de 7" o 9" a color con conectividad para Apple CarPlay y Android Auto y computadora de viaje. Pero lo más significativo, es que el confort de los asientos ha mejorado, gracias al uso de poliuretano de mayor absorción, cabeceras que mitiguan el efecto latigazo y ajuste eléctrico. Se rediseñó la sección trasera de la cabina, pensando en la comodidad, pero también en la accesibilidad, sumando nuevos asientos y un ángulo de apertura mayor en las puertas de atrás. En los modelos de trabajo, los interiores están pensados para ser más utilitarios y menos sofisticados. La insonorización es más generosa y el volante es de ajuste telescópico, para que no te cueste encontrar la postura ideal.
La nueva Dmax de Isuzu será motivada por dos motores. Primero está un propulsor 4JJ3-TCX de tres litros, con 190 Hp y 332 lb-pie de torque. El segundo motor, es el RZ4E 1.9, también turbodiésel, de 190 Hp y 258 lb-pie de torque. Ambos motores se asocian a transmisiones de seis velocidades, manual y automática, con opciones de tracción simple o a las cuatro ruedas con diferencial electromagnético de bloqueo electrónico en el eje trasero y un cardan de aluminio. Tanto la suspensión como los frenos fueron revisados, cosa de lograr una mayor estabilidad y una mejor maniobrabilidad.
Si consideramos que Mazda firmó un acuerdo con Isuzu para fabricar una pickup, queda la posibilidad de que algún día veamos este modelo en México.