En el marco de celebración de su 35° aniversario, Infiniti da a conocer todos los detalles relacionados al diseño del Q45, el primer modelo de la marca, que además es considerado un ícono moderno y para ello, trajo de vuelta a Jun Shimizu, exvicepresidente de diseño de Nissan, quien supervisó su desarrollo.
De hecho, el mismo confirma que la dirección conceptual de este auto se estableció cuatro años antes de su llegada, a través del concepto "CUE-X" de Nissan, que debutó en el Salón del Automóvil de Tokio en 1985.
El Q45 se presentó oficialmente al mundo bajo las luces del Salón Internacional del Automóvil de Norteamérica en Detroit en enero de 1989. Shimizu atribuye el trabajo al diseñador principal, Shunji Yamanaka, quien superó la misión de "crear algo que la gente nunca hubiera visto antes".
De hecho, Shimizu recuerda que la decisión de omitir una parrilla de radiador no fue tomada a la ligera por el equipo de diseño del Q45, ya que ello pudo haber tomado una dirección completamente diferente.
"El equipo de diseño estaba básicamente dividido en dos: uno que prefería una parrilla o un emblema y otro que quería que la parte frontal fuera completamente limpia", dijo Shimizu. "Yo personalmente quería un emblema bastante grande en la parte frontal, así que, de alguna manera, la inclusión de un emblema sutil y sin parrilla fue un punto medio".
Shimizu confirma que, contrariamente a lo que algunos creen, el logo inicial de Infiniti, que debutó en el emblema del Q45, fue creado en Norteamérica, mientras que el patrón floral que lo rodea fue diseñado por el equipo en Japón.
El diseño floral se inspiró en el estilo cloisonné que, aunque puede ser asociado en la mayoría de los casos con el arte y la joyería fina, en el ámbito automotriz también es una técnica que se usa para decorar materiales.
El diseño del exterior del Q45 hizo perfecta armonía con un interior minimalista que no utilizaba elementos tradicionales de la época, como las incrustaciones de madera. En su lugar, la tecnología integrada ofrecía comodidad y una experiencia de manejo superior.
"El Q45 era bastante grande por fuera, pero la cabina no era especialmente espaciosa, sobre todo la altura de la segunda fila. Esto fue una decisión consciente, ya que optamos por priorizar el diseño sobre el espacio para la cabeza en los asientos traseros, especialmente con el enfoque en que fuera un vehículo para el conductor".
Mientras que los compradores en Norteamérica podían acceder a características como un sistema de sonido Bose, asientos delanteros ajustables eléctricamente con memoria, ventanas eléctricas de un solo toque, control de clima digital y sistema de entrada sin llave, muchas de estas características se quedaban cortas en comparación con las opciones de lujo disponibles en el mercado japonés. Por ejemplo, se podía acceder a una llave de oro de 18 quilates (con un precio superior a 500,000 yenes).
¿Conocías estos detalles detrás del Infiniti Q45? ¿Crees que es un clásico moderno que debería ser más valorado?
