La década de los 90 es para los deportivos japoneses, lo que los 60 para los muscle cars. Simple y sencillamente, es la época donde todos los fabricantes de Japón mostraron al mundo de lo que eran capaces de hacer.
Fue tal su impacto, que no solo los autos, sino la cultura JDM trascendió más allá de Japón gracias al éxito de mangas y animes como Initial D y Wangan Midnight así como videojuegos como Gran Turismo. Incluso las primeras entregas de Rápido y Furioso, tenían una alta dosis de JDM.
Nissan Skyline GT-R, Toyota Supra, Honda NSX, Mitsubishi Lancer Evolution, Subaru WRX STi, Mazda RX-7, Suzuki Cappuccino, Autozam AZ-1, Mitsubishi Eclipse, Acura Integra Type-R, Nissan 240SX, Toyota Celica, Honda Civic Si, Toyota AE86, e incluso los Lexus ES e Infiniti Q45, son algunos de los autos japoneses más icónicos de la época que nos hicieron soñar. A México solo llegaron un puñado de estos autos.
Tras algunos años de haber perdido el rumbo. La industria japonesa parece estar inmersa en la que a punto de vista personal califico como la “edad de plata de los deportivos japoneses” y es que de un tiempo para acá se han presentado modelos que no solo son dignos sucesores de aquellos deportivos de los noventa, sino que además, son, probablemente, los últimos en ofrecer un manejo “purista” a través del uso de la caja manual de forma habitual.
Mazda MX-5, Nissan Z, Honda Civic Si y Type R, Acura Integra, Toyota Supra, GR Yaris, GR Corolla, GR86, Subaru WRX y BRZ,Suzuki Swift, Dahiatsu Copen, etc. ¿Qué tienen en común? Una puesta a punto que prioriza la diversión al volante y sí,para lograrlo, todos cuentan con transmisión manual.
Es cierto, la lista de modelos actual es mucho más reducida que antes, pero ponte a pensar y prácticamente todas las marcas “no premium” de Europa y Estados Unidos, renunciaron a los deportivos asequibles para enfocarse completamente en la electrificación.
Mientras que Japón, en un acto, casi romántico, antes de dar el brinco a los vehículos cero emisiones, nos da la oportunidad de manejar los últimos deportivos para los amantes de la conducción clásica, de esa que prioriza las sensaciones y te dibuja una sonrisa de lado a lado. Todo sin renunciar a un elevado performance.
¿Pero sabes qué es lo mejor de la edad de plata de los deportivos japoneses? Que a diferencia del pasado, la mayoría se venden en México o están en camino de llegar como la nueva generación del Z, que sin decirte, una fecha exacta, está a semanas de iniciar su venta oficial en nuestro país.
Hoy, como cuando era niño, sueño por manejar un Z o un Supra en un camino de montaña al atardecer para disfrutar de su performance, más allá de Gran Turismo 7. Lo bueno, es que esta profesión me ha permitido disfrutar de algunos de estos autos, aunque sea de una forma breve, pero altamente disfrutable. Si ya era un gran fan de los autos japoneses, ahora lo soy un poco más.
¡Larga vida a los autos japoneses con caja manual! Bueno, al menos, hasta que la electrificación sea inevitable.
*Esta columna expresa el punto de vista del redactor y no necesariamente el posicionamiento de Autocosmos.