Los Supersónicos (The Jetsons), es una serie animada lanzada originalmente en 1962 aunque, su mayor éxito se dió con los nuevos capítulos emitidos entre 1985 y 1987. De hecho, habrás notado que en los últimos días, este programa ha vuelto a ser tendencia, debido a que el 31 de julio de 2022, marca la fecha de nacimiento del Sr. Sónico.
Cuando era un niño, me gustaba ver las aventuras futuristas y optimistas de la familia Sónico (no como ahora, que todo tiene una pinta apocalíptica), sobre todo por las soluciones tecnológicas que se mostraban en un hipotético 2062, mismas que todavía hace 35 años, eran poco menos que ciencia ficción.
Las pantallas planas, las videollamadas, clases a distancia, las smart TV, los smartwatches, casas inteligentes, bandas caminadoras, e incluso los asistentes de inteligencia artificial como RUDI ya son una realidad. Alexa y Google Home son un buen ejemplo. Incluso, hoy es posible adquirir robots aspiradora y trapeador. Y si todo sigue conforme a las previsiones del CES, más pronto que tarde tendremos una Robotina en nuestra casa.
Pero si hay algo que me maravillaba de los Supersónicos eran los autos voladores, uno de los íconos de la serie. Te apuesto que en tu mente está muy presente el sonido tan característico de estos vehículos que además, se convertían en un portafolio ¡adiós problemas de estacionamiento! Su influencia es tal, que incluso algunos eléctricos actuales tienen un ruido artificial similar al de estos aeroautos.
A diferencia de muchas tecnologías mostradas en Los Supersónicos, son precisamente los autos voladores, los que lucen más distantes. Es cierto, con la llegada de los autos eléctricos y la conducción autónoma, la industria automotriz actual está sometida a la que es considerada su mayor evolución en los últimos 100 años, pero, esta tecnología aún parece que tardará en llegar ¿o no?
Si bien Los Supersónicos, no fueron los primeros en imaginar esta tecnología, sí, fueron los que asentaron mucho del futurismo que especialmente se hizo popular en los ochenta. Pero en realidad, la humanidad lleva pensando en este tipo de movilidad desde mucho antes de lo que te imaginas.
Tal vez, quien sentó las bases fue el soñador Julio Verne, que en su obra “Dueño del Mundo” de 1904, describe a un singular vehículo llamado Terror, una especie de mezcla entre coche, barco y avión. Sin embargo, el primer registro “real” de un auto volador data de 1917 cuando el ingeniero estadounidense Glenn Curtiss patentó el Autoplano, aunque, nunca llegó a surcar los cielos. Para 1920, en la oficina de marcas y patentes de Estados Unidos, ya se habían registrado cerca de 80 proyectos diferentes
En los siguientes años, la evolución continuó, pero casi siempre, todos los proyectos eran autos con alas. Fue, hasta la llegada de la fiebre espacial de los cincuenta, cuando se empezaron a concebir de manera diferente. Además, de Los Supersónicos, después llegaron otras producciones como Volver al Futuro, El quinto elemento e incluso Dragon Ball, que nos han regalado sus propias versiones de autos voladores.
Pero, volviendo a la realidad, desde hace algunos años, han aparecido propuestas realmente interesantes que ya no solo nos hacen soñar con autos voladores, sino ahora más que nunca, acercan esta tecnología a un nivel más aterrizado y que pronto, podrían ser una realidad. Aún, pese a la advertencia de Elon Musk que en 2018 declaró que su desarrollo y posible proliferación sería un peligro para la humanidad.
En el nuevo siglo, proyectos como el AeroMobil y Terrafugia, sentaron los primeros proyectos, con una mayor viabilidad, no solo tecnológica, sino económica. Pero no fue hasta la llegada e involucramiento de Uber, que esto comenzó a tomarse con mayor seriedad. No hay que olvidar que en la actualidad, la empresa ya cuenta con el servicio de Uber helicopter.
En 2017, la empresa contrató un ingeniero de la NASA para desarrollar una flota de autos voladores, la cual debería de haber estado lista en 2020. La meta no se cumplió, pero en el CES de ese año, la empresa presentó el concepto S-A1 desarrollado en conjunto con Hyundai. Si bien, no hemos tenido más noticias de este proyecto, en su momento, ambas compañías afirmaron que en 2023 su aerotaxi estará listo para operar.
De hecho, justo hace unos días, Rolls-Royce y Hyundai Motor anunciaron que colaborarán en llevar la propulsión totalmente eléctrica y la tecnología de celdas de combustible de hidrógeno al mercado de movilidad aérea avanzada (AAM). La alianza aprovechará la experiencia de la surcoreana en el rubro del hidrógeno, mientras que la británica, aportará todo su expertise en materia de aviación.
Pero Hyundai, no es la única empresa interesada en crear autos voladores, ya que Suzuki y SkyDrive, se declararon listos para ingresar al mercado de los taxis aéreos con el SD-03. También, Porsche, Boeing, Audi, Daimler y Volkswagen, han presentado sus propios proyectos.
Ojo, esto no quiere decir que en un par de años podrás ir a un concesionario y salir volando a toda velocidad, ya que como podrás haber notado, el enfoque de estos autos voladores está completamente volcado a los servicios de movilidad aérea avanzada, que como siempre ocurre, primero estarán disponibles en países de primer mundo. Además, habrá muchos temas de regulación, infraestructura, seguridad y medio ambiente que habrá que resolver antes de emprender el vuelo.
Lo que es un hecho, es que los primeros pasos serios, por fin se han dado. Quién sabe, tal vez, para el 2062, las cosas ya serán un poco diferentes y tal y como Súper Sónico podremos surcar los cielos con total seguridad en nuestro propio auto volador compacto color verde ¿o no? Tú que opinas.
*Esta columna expresa el punto de vista del redactor y no necesariamente el posicionamiento de Autocosmos.
