Subaru BRZ 2022 a prueba; alabado sea el fabricante, un deportivo a la vieja escuela

La mera existencia del Subaru BRZ, se contrapone a las macro tendencias que vive la industria automotriz moderna. En un mundo donde la viabilidad de los vehículos, la dictan los estados financieros, y en donde solo hay recursos para desarrollar híbridos, eléctricos y SUV, que este pequeño coupé a la vieja escuela sobreviva es todo un triunfo.

Los fabricantes japoneses como Subaru son más proclives a tratar de proteger su esencia y sus tradiciones, a veces a costa de arriesgar su existencia misma, mientras que los occidentales, ya sean americanos o europeos, salvo contados casos excepcionales cambian de rumbo según lo demanda el mercado.

El mantenerse fiel a principios como los motores bóxer o los sistemas de tracción integral, si bien le han permitido a Subaru crear una identidad única, también propició que se llenara de problemas financieros hace años, pero afortunadamente un titán de la industria apareció como caído del cielo para formar una alianza estratégica que permitiría a Subaru seguir haciendo las cosas a su manera, me refiero nada menos que a Toyota.

La colaboración entre ambas es profunda, pero la más conocida es sin duda la que permitió crear el pequeño deportivo que hoy nos ocupa. El BRZ, que evidentemente tiene su contraparte dentro de Toyota, el GT86, que dicho sea de paso, nunca llegó a nuestro mercado.

Afortunadamente y aun a sabiendas de que sería un producto de nicho, Subaru se animó a traer el BRZ a México y ahora en su segunda generación, esa plausible decisión se mantiene.

Subaru BRZ 2022: ¿Nueva generación?

Por principio de cuentas vale la pena decir que el BRZ 2022 reutiliza la plataforma del modelo saliente, pero los cambios en suspensión y dirección, así como la llegada de un motor de mayor desplazamiento y potencia, además de un interior totalmente nuevo, podemos decir que sí es una nueva generación en toda regla.

Adicionalmente vale la pena decir que, tratándose de autos deportivos, es bastante común que los fabricantes modifiquen y evolucionen las plataformas ya existentes, ya que al ser productos de bajo volumen, el rediseñar frecuentemente todo desde cero es poco viable. Incluso la poderosa Porsche con su icónico 911 lo hace.

El motor sigue siendo de aspiración natural, pero ahora crece el desplazamiento hasta 2.4 litros, en realidad se trata del mismo bloque empleado por el WRX pero sin el turbo, con lo cual, esta planta de poder es capaz de subir hasta las 7 mil. La potencia se ubica en 228 hp y el torque 184 lb-pie.

Hay opción de caja manual o automática, en ambos casos de seis velocidades y la potencia es enviada al eje trasero.

Eso sí, el optar por la variante de dos pedales nos da acceso al paquete de tecnologías de seguridad denominadas EyeSight, que integra asistencias a la conducción como: frenado automático de emergencia, alerta de tráfico cruzado y alerta de abandono de carril, entre otros.

Subaru BRZ 2022: Interior

Puertas adentro la mejora es dramática, la calidad de materiales y ensamble dieron un salto importante, se mantiene esa aura como de auto deportivo clásico, pero con paneles y detalles de mejor factura. La atmósfera en el interior es muy agradable.

La pantalla central táctil es de 8”, hay compatibilidad con Apple Carplay y Android Auto, la interfaz es fácil de utilizar, hay climatizador automático de dos zonas, volante multifunción, encendido mediante llave inteligente y un sistema de audio bastante decoroso. En cuanto al equipamiento la verdad no falta nada.

Los asientos ofrecen muy buena sujeción lateral, pero no son duros, son bastante cómodos, incluso para trayectos prolongados aun cuando la postura demanda ir muy cerca del piso.

Hay un par de asientos en la parte trasera, es decir el Subaru BRZ es un 2+2, sin embargo el espacio es reducido en extremo, no apto para ningún adulto, incluso carece de cabeceras, con lo cual podríamos decir que más bien es un biplaza.

Subaru BRZ 2022: Manejo

Tras el volante, el Subaru BRZ es una delicia, de esos autos que logran transmitir sensaciones gratificantes con cada giro, cambio de marcha y aceleración.

Siendo bien claros, el BRZ no es un auto particularmente rápido, no es la idea y por lo tanto, si te pones en un semáforo contra algo turbo, ten por seguro que te van a sacar mucho coche. Sin embargo, en el BRZ el 0 a 100 km/h o la velocidad punta jamás fueron prioridad, este es un auto que te divierte a velocidades legales.

Pero lo anterior tampoco quiere decir que el BRZ sea malo en el apartado de las reacciones y recuperaciones, de hecho, el incremento de cubicaje le vino de maravilla, la curva de par es prácticamente plana desde las 2,500 y se mantiene ahí prácticamente hasta las 7 mil vueltas, es tremendamente elástico y siempre hay potencia suficiente para catapultarlo con firmeza al salir de una curva.

El Subaru BRZ brilla más en una carretera sinuosa que en una autopista, la suspensión tiene un ajuste perfecto entre comodidad y deportividad, no llega a ser duro como para castigar a los ocupantes, pero es lo suficientemente firme para plantarse de manera muy aplomada en las curvas. También vale la pena decir que es mucho más un GT que un auto para pista y eso, desde mi percepción es perfecto.

Por su parte, la dirección es precisa y comunicativa, mientras que la caja automática (que fue la que nos tocó probar) resultó mejor de lo que esperaba. Es rápida, mantiene los cambios en situaciones de manejo deportivo y logra extraer bien la potencia del motor, claro esto se debe a que como mencionaba, la curva de par es súper plana y amplia.

Claro está que si de verdad eres un purista del manejo, la opción es la transmisión manual, aunque sacrificarás en el apartado de seguridad, unas por otras.

Subaru BRZ 2022: Conclusión

El Subaru BRZ 2022 resultó una bocanada de aire fresco en medio de una industria que se ha volcado por completo hacia los SUV, es un deportivo a la vieja usanza; atractivo, divertido y personal, egoísta incluso.

Es un perfecto tercer auto, aunque es perfectamente utilizable para el diario, si es que no eres de esos que necesitan llevar familia, mascotas o amigos. Uno de esos caprichos que ojalá muchos se puedan dar, porque conjuga todos esos valores que nos hacen ser entusiastas y apasionados de los autos.