Mitsubishi, es una marca centenaria, que construyó su primer automóvil allá por 1917. De hecho, es considerada, la primera firma automotriz de Japón. Pese a su riqueza histórica, tuvieron que pasar más de ocho décadas, para que la compañía arrancara operaciones en México, al aprovechar la alianza comercial que mantenía con Chrysler México, empresa que a la postre cambiaría su nombre a FCA México.
Tal vez no lo sepas, pero mucho antes, más en específico en 1991, de manera indirecta, los mexicanos estuvimos a punto de contar con uno de los autos más espectaculares jamás construidos por Mitsubishi, ya que en ese año, el fantástico 3000GT, estuvo a nada de ser vendido en nuestras fronteras bajo la identidad de Dodge Stealth R/T, pero al final, se vino abajo el proyecto, quedando como único testigo, un fallido comercial televisivo que puedes encontrar fácilmente en YouTube.
Como puedes ver, desde el arribo oficial de Mitsubishi en enero de 2003, la historia de la marca en México está llena de altibajos. En este tiempo, la conocimos como marca la japonesa ligada al mundo del rally. Era una época en donde triunfaba tanto en Dakar como en WRC. El catálogo de productos eran Outlander, Montero Limited, Montero Sport, Space Star, Galant y Eclipse, además de los Evo IX y X prometían mucho.
Después, llegó la crisis global y el perfil entusiasta de la marca cambió drásticamente, iniciándose un breve periodo, un tanto oscuro, hasta que, tras varios años de estar de capa caída, la compañía fue adquirida por la Alianza Renault-Nissan en 2016. Y con ello, se empezó a escribir un nuevo capítulo de la marca no solo a nivel mundial, sino también en México.
Y es que si bien, los directivos de FCA México, se esforzaron para no dar detalles al respecto, es un hecho, que, a partir de febrero del presente año, Mitsubishi toma un camino separado de la mano de Jorge Vallejo, su nuevo CEO, en el que aprovechará todos los beneficios de formar parte de un gigante como lo es la Alianza Renault-Nissan, para buscar afianzarse de una vez por todas en el mercado mexicano, uno de los más competitivos y difíciles de todo el mundo.
Si bien, la información todavía ha sido filtrada a cuentagotas, Autocosmos tuvo acceso a una buena fuente, que, si bien no debe de tomarse como oficial, si nos da un panorama bastante amplio de como será el presente y futuro de Mitsusbishi en el mercado mexicano.
NUEVOS PRODUCTOS Y CONCESIONARIOS
Para empezar, la gama de productos que actualmente ofrece sufrirá un reacomodo. Si bien, en la alineación de productos se mantienen Mirage, Outlander, Montero Sport y Montero Limited, es casi un hecho, que habrá un reajuste de versiones, y con ello, seguramente, llegarán nuevos niveles de equipamiento.
En cuanto a los lanzamientos que veremos este año, destaca la introducción de Eclipse Cross (crossover que a nivel mundial se coloca en medio de ASX y Outlander), modelo que incluso, ya hemos tenido la oportunidad de fotografiar camuflado mientras realizaba las pruebas de homologación en los caminos de nuestro país. Inmediatamente, después, la nueva L200 2019, que hace poco fue sometida a un profundo lavado de cara, hará su aparición. Ojo, también, se rumora que la exitosa Outlander PHEV (una SUV eléctrica enchufable) podría llegar para satisfacer a los interesantes en un vehículo amigable con el medio ambiente.
Sin duda, todos estos lanzamientos lucen bastante interesantes, pero Mitsubishi, tiene un as bajo la manga, que seguramente le permitirá aumentar su volumen de ventas: el Attrage. Y es que en un movimiento similar al de Toyota Yaris R y Mazda2 Sedán, Mitsubishi lanzaría al mercado este derivado del Mirage con una configuración, que teóricamente, lo pondrían en ventaja con el Attitude, que básicamente, es el mismo auto, pero comercializado con el sello de Dodge. Mismo que al parecer, se mantendrá en el mercado por unos cuantos años más, respetando el contrato firmado por la japonesa y FCA México.
Es cierto, que la nueva alineación de productos suena bastante interesante, pero también a nivel distribución habrá cambios. Para empezar, Mitsubishi sometió a una especie de auditoría a los actuales concesionarios, para elegir a aquellos que gracias a que cumplen ciertas normas, seguirán representándolos en México. Sin embargo, para robustecer su presencia, también se abrirán nuevas agencias, cuyos socios, serán tomados de la plataforma ya existente de Nissan y Renault.
Al menos que existan cambios de última hora, esta sería la estrategia base de Mitsubishi para conquistar el mercado mexicano. Puede que, ante ojos de los entusiastas de la marca, ya no sea la misma de antes, pero no hay que perder de vista que la marca está enfocada en recuperar la imagen perdida, y eso incluye su regreso al Dakar y WRC. Posiblemente, estemos ante el resurgimiento de un grande, y que bueno, que los mexicanos seremos testigos de ello.
