
Aunque el Aston Martin Valkyrie es uno de los más exclusivos y complejos del planeta, ni siquiera él se salva de una llamada a revisión.
La marca británica emitió un recall en Estados Unidos para 11 unidades de calle del modelo debido a un problema potencial en el mazo de cables trasero, derivado de unos tornillos de longitud incorrecta.
Según el reporte presentado ante la National Highway Transportation Safety Administration (NHTSA), el detalle técnico radica en que unos tornillos, de largo desconocido, pero incorrecto, que sujetan un panel en la caja de fusibles podrían chocar con un conjunto cables.
Esto podría ocasionar daños por calor en la caja de fusibles y provocar fallos en funciones clave como la dirección asistida o las luces delanteras. Nada menor cuando hablamos de un auto que hoy cuesta 3 millones de dólares.
La solución es simple: reemplazar los tornillos problemáticos por siete tornillos de exactamente 9.53 mm. El boletín de Aston Martin señala que el trabajo debería tomar solo una hora de mano de obra, lo cual resulta casi anecdótico considerando lo intrincado y caro que es el Valkyrie.
Aunque el número parezca bajo, 11 autos representan casi el 5% de toda la producción del Valkyrie a nivel mundial, 275 unidades en total, sin contar las 40 versiones de pista AMR Pro. En el contexto del mercado estadounidense, este recall afecta una porción aún más significativa del total vendido en ese país.
Hasta el momento no se sabe si alguno de los 4 Valkyrie que se encuentran en México se unen a esta llamada a revisión.
Así que sí, incluso los protectores de los dioses del Olimpo automotriz a veces pueden perder un tornillo.