El Rally Dakar 2024 llegó a su fin y con ello el sufrimiento de Audi, que durante 2022 y 2023 tuvo que ver cómo el rally más duro del mundo le cobraba el noviciado y, a pesar de su gran inversión estuvo muy lejos de poder competir por la victoria. Sin embargo, este año Carlos Sainz llevó a la marca de Ingolstadt a lo más alto.
La edición 2024 de esta competencia había quedado casi sellada el jueves, pues el madrileño sacó más de una hora de ventaja frente a sus rivales, sin embargo, nadie puede celebrar antes de tiempo y hoy había que disputar la etapa final del Dakar, misma en la que Sainz se lo tomó con mucha calma, asegurándose de llegar a la meta para sellar el triunfo.
Ahí, en la meta de Yanbu, vivió otro emotivo momento, pues una noche antes su familia, incluyendo a su hijo y piloto de Ferrari en la Fórmula 1, Carlos Sainz Jr., viajaron a Arabia para recibirlo con un abrazo y festejar este logro, el cuarto título del Dakar para él.
Sorpresivamente, Sainz no ganó una sola etapa y Audi sólo se impuso en el Prólogo, de la mano del sueco Mattias Ekström, una muestra que la constancia paga mejor que la ambición de arrasar.
"Estoy muy contento, como pueden imaginar. Ganar, pero sobre todo con este coche tan especial, tan complicado de poner a punto para ganar, para una cuarta marca diferente, con tanta gente que no creía en él y para el último intento de la marca. Todo esto quiere decir que cuando trabajas duro, crees en ti mismo y estás rodeado de un buen equipo, consigues los frutos de tu trabajo.
“Si estoy aquí a mi edad, todavía a este nivel, es porque trabajé duro antes y no dejé de creer en mí mismo. No sucedió así porque sí. Voy a saborear esta victoria y a pensar en los próximos pasos de mi carrera durante las próximas semanas”, afirmó el Matador.
Con ello, Sainz y Audi se convierten en los primeros que ganan el Rally Dakar con un vehículo movido por un motor 100% eléctrico, el RS Q e-tron, que aprovechó elementos mecánicos que la marca alemana había desarrollado en otros seriales de carreras, poniendo así la batería, inversores y propulsores eléctricos de su auto de la Fórmula E y un motor de gasolina traído del DTM, creando así un eléctrico de rango extendido.
Audi invirtió muchos millones de euros en esta victoria, que comenzó a trazarse desde la semana pasada, cuando Carlos Sainz fue el gran ganador de la maratón de 48 horas en el Empty Quarter, desde ahí, la escuadra alemana se enfocó en cuidar al Matador y su ventaja.
“Audi volvió a marcar un hito en el deporte del motor: la victoria en el rally del desierto más duro del mundo con un propulsor electrificado es un fiel reflejo de nuestro lema ‘Liderazgo por tecnología’ y señala el camino hacia nuestro futuro eléctrico”, aseguró Gernot Döllner, CEO de Audi AG.
La marca alemana se mantendrá corriendo las cuatro fechas restantes del Campeonato Mundial de Rally-Raid (W2RC) antes de decir adiós definitivo a la especialidad, para enfocarse en el proyecto de Fórmula 1, que lo verá debutar en la temporada 2026 de la mano del equipo Sauber.
Se ha rumorado que Carlos Sainz tiene una oferta de Ford para ser su piloto oficial el próximo año, a los mandos de la Ranger Raptor.
