Si “ubicas” al Toyota Supra de los 90, seguramente también al Dodge Stealth, un deportivo con linaje asiático (Mitsubishi); la rivalidad de entonces no fue tan sonada, pero digamos que el Stealth “tenía con qué pelear” gracias a su motor 3.0 litros. Pero ese no es el punto, sino el rumor que recientemente Motor Trend retomó señalando que el Dodge Stealth volvería a las filas de la marca.
Como era de esperarse, este retorno sería todo lo opuesto a la carrocería coupé que se le conoció al Stealth, así que adivinaste, después de una silueta SUV tiene todas las posibilidades de revivir el nombre.
La hasta ahora hipotética Dodge Stealth llegaría para sustituir a Durango, uno de los modelos más populares de la marca pero que, ante la oleada eléctrica, tiene un futuro algo incierto, mientras que Stealth podría desarrollarse sobre las plataformas más nuevas de Stellantis y que además dan cabida a distintos niveles de electrificación.
En cuanto a las posibilidades mecánicas, en el papel, Stellantis tendría varias opciones, claro que todo depende del tipo de vehículo que al final decida desarrollar (o no), pero “tranquilamente”, el nuevo motor Hurriacane 3.0 L biturbo y diferentes tipos de asistencia eléctrica podría ser una de las opciones, motorización que por cierto, sería requerida por el Jeep Wagoneer 4xe.
Mientras tanto, Dodge ya ha comenzado la “sensibilización” de su mercado en temas eléctricos con la llegada de Tonale PHEV y su primo hermano, Hornet R/T PHEV.
¿Te gusta la idea de revivir modelos deportivos en siluetas de SUV?