A título personal, siempre he creído que el Caliber era una grandiosa idea, mal ejecutada. Era un crossover adelantado a su época y sin duda, tenía algunas virtudes siendo la modularidad la principal de ellas ¿recuerdas las bocinas en la cajuela o la lámpara desmontable? Además, era un vehículo relativamente asequible y podía montar tracción AWD.
Llamado a ser el modelo que salvaría al Grupo Chrysler, terminó por hacer todo lo contrario. Y es que, si bien al inicio se vendió como pan caliente, el interés generado pasó muy rápido debido a la calidad de los plásticos del interior, pero sobre todo a la mala fama generada por la caja CVT.
Incluso la versión SRT-4 con sus 285 Hp no sobresalió debido a un manejo impreciso que no fue del todo pulido y no pudo ser un sucesor correcto para el Neon SRT-4. En fin, con el Caliber a Chrysler, le salió el tiro por la culata.
Lo curioso, es que la fórmula del Caliber fue reinterpretada por otros fabricantes que sí dieron en el clavo y obtuvieron un gran éxito. El caso más sonado fue el Nissan Qashqai, pero no nos desviemos del tema.
Lo que tal vez no sabías, es que el este modelo estuvo a punto de ser un auto completamente diferente al que llegó las líneas de producción y es que, en 2022, en Reddit, el usuario @lostboyz, un extrabajador de Dodge, publicó las imágenes del que hubiera sido el Caliber, el cual, para sorpresa de muchos, era mucho menos pretencioso, ya que no era otra cosa que un Mitsubishi Lancer de décima generación remarcado.
A decir de @lostboyz, este auto fue capturado en el “lote 27”, donde estaba cubierto de nieve y hielo. En su momento, decidió no publicar las fotos para evitarse problemas con la marca, pero más de una década después, hizo público su hallazgo.
Como verás, la estrategia de Dodge, era muy similar a la usada en modelos como el Attitude, y es que no hizo otra cosa que tomar un Lancer y cambiarle la parrilla, fascia y emblemas. De hecho, atrás se puede leer el nivel de equipamiento correspondiente a la versión SXT. La cual a juzgar por la estética hubiera sido un equivalente al acabado GTS de Mitsubishi.
Finalmente, Chrysler decidió que no era un buen sucesor para el Neon, por lo que trasladó todos sus esfuerzos (y el nombre Caliber) en el crossover en el cual estaba depositadas muchas de sus esperanzas hacia el futuro. El cual finalmente se presentó como un prototipo en 2005 para salir a la venta el público en 2006. Aunque finalmente sería descontinuado en 2012.
Sin duda, si Chrysler hubiera apostado por ofrecer mejores materiales interiores, una caja convencional y una puesta a punto un poco más refinada, sin duda, el Caliber hubiera pasado a la historia como el auto que salvó a la compañía y no, como el que la terminó de hundir.