El modelo con más años a la venta de forma consecutiva en el mundo, es la Chevrolet Suburban, la cual data desde 1935. Para poner esto en contexto, dentro de tres años ¡estará celebrando su 90 aniversario! Incluso, es mucho más longeva que algunas marcas como Honda, KIA, Hyundai e incluso Volkswagen.
Otros modelos que tienen varias décadas en su haber son la Ford Serie F (1948), Volkswagen Transporter (1949), así como el legendario Mustang (1964) o los Toyota Corolla (1966) y Honda Civic (1972). También podríamos mencionar al Corvette (1953), sin embargo, no hay que olvidar que no se fabricó en 1983, así que ese único año, lo deja fuera del conteo de forma oficial.
Pero, lo más interesante, es que mientras los modelos antes mencionados, han sufrido importantes metamorfosis para adaptarse al correr del tiempo, la Suburban por su parte, sigue con la misma filosofía desde un inicio, y es que siempre ha sido un enorme modelo robusto con capacidad para trasladar a 7 u 8 pasajeros. No, por nada, se le considera un precursor de los SUV.
Siempre la historia universal, va a ser muy interesante, pero como bien ya sabes, tengo una debilidad por desenterrar algunos de los secretos mejor guardados de la industria automotriz mexicana y justo, en esta tónica me di a la tarea de encontrar al modelo con más años a la venta de forma consecutiva en México y deja te digo, que me llevé muchas sorpresas.
En este momento, juguemos un poco mientras haces memoria, tratando de hallar en tu mente, al modelo más antiguo de México. Sí, ese cuyo nombre lleva décadas en nuestro mercado y parece ser un habitante natural del país.
De una vez te adelanto que debes de descartar al Ford Mustang, ya que si bien se presentó en México en 1964, salió del mercado en 1984, para regresar 10 años después. Así, que, no cumple con el principal requisito de estar presente de forma permanente.
¿Y qué hay de la Suburban? Si es el modelo más longevo del mundo, también lo tiene que ser de México ¿o no? Pues bien, la historia de este modelo en nuestro país es muy diferente, ya que de manera oficial se presentó en 1987, es decir más de 50 años después de su debut original. Pero deja te digo, que, pese a ello, se trata de uno de los modelos más veteranos de este conteo.
De hecho, en ese mismo año, es decir en 1987, se introduce el Volkswagen Jetta, que desde entonces, se ha convertido en una verdadera leyenda en nuestro país. Aunque, la primera generación que aquí se conoció como Atlantic hubiera mantenido el nombre original, deja te digo, que lamentablemente, no estaría ni cerca de quedarse con el título.
¿Y qué hay de Ford Lobo? Aquí, ya nos acercamos bastante, ya que si bien este nombre comienza a usarse de forma habitual desde mediados de los noventa, en realidad, data desde 1982, cuando daba nombre a la F-150 Explorer Lobo, que era el tope de gama desde aquel entonces.
¿Entonces? Si no es Lobo, Suburban y mucho menos Jetta ¿Cuál es el vehículo más longevo de México? La respuesta es muy simple, ya que se trata de la Chevrolet Cheyenne, la cual aparece en 1971 como la versión más equipada de la C10.
Mientras que en Estados Unidos, fue perdiendo relevancia con el paso de los años para finalmente ser desechado en 1998 a favor de la denominación Silverado, en México pasó todo lo contrario, ya que aquí, siempre se ha mantenido para dar vida a las versiones más equipadas de las camionetas de Chevrolet.
Incluso, a mediados de los noventa, se evaluó la opción de hacer el cambio de nombre, ya que en México esta camioneta se conoció como Silverado Cheyenne. Sin embargo, la tradición no pudo romperse y el consumidor mexicano siempre prefirió la denominación que hace referencia a las tribus Cheyenne.
De hecho, solo hay que recordar, el famoso comercial: ¿Y la Cheyenne apá? que fue usado para promocionar al modelo 2007. Me atrevería a decir que su penetración en el imaginario colectivo fue tal, que hoy, prácticamente, no hay mexicano que no conozca o haya escuchado de esta ingeniosa campaña publicitaria. Incluso hay memes a su alredor.
Pero lo mejor de la Cheyenne, es que desde hace décadas, se fabrica en México. Primero en la extinta planta de la Ciudad de México, para después trasladar su maquila a la planta de Silao, Guanajuato. Así que, esta pickup, es una leyenda al doble.
Ahora, entiendo por qué está tan impregnada en el ADN de muchos fans, que la ven como un modelo tan mexicano como el nopal. Que el nombre Cheyenne siga en México por muchos años más, pero sobre todo, ojalá, que se siga fabricando en nuestro suelo, por un largo tiempo.
Larga vida a la Cheyenne apá…
*Esta columna expresa el punto de vista del redactor y no necesariamente el posicionamiento de Autocosmos.
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