
Desde hace años Mazda se ha caracterizado por ofrecer un nivel de manejo que va mucho más arriba de lo que se espera de una marca de volumen. Sus deportivos son un claro ejemplo de ello y a pesar de que ya nos hayan confirmado que la nueva generación del Mazda MX-5 2027 llevará un motor atmosférico de 4 cilindros y 2.5 litros, también acaban de liberar una patente que busca que autos como ese y otros deportivos que tengan planeados a futuro, se puedan seguir disfrutando cómo antes aunque se vuelvan eléctricos.
Primero que nada hay que dejar bien en claro que el que una marca publique una patente no significa que se volverá una realidad pronto. A veces hacen esto solo para proteger sus ideas o tenerlas listas en caso de que las condiciones del mercado requieran algo similar a ese plano.
Actualmente los autos eléctricos siguen una forma muy común con un esquema de “patineta”. Eso quiere decir que tas baterías se acomodan como un paquete simétrico y solido lo más cerca del suelo a lo largo de toda la zona baja del auto. Algo que realmente no es malo para un sedán común o un SUV que priorizan el espacio y comodidad ante cualquier otra cosa.
Desafortunadamente un acomodo cómo el ya mencionado no es la mejor opción para un deportivo, pues para un auto de ese estilo es más conveniente tener lamayor cantidad de peso concentrada al centro bajo del auto. Justamente de esto último mencionado va la patente de Mazda.
En el esquema y explicación adjunta a la misma, los ingenieros de Mazda describen que para lograr un mejor balance, buscarían colocar un paquete de baterías que se acomodara al centro del auto, en la zona que generalmente albergaría a la transmisión y túnel de escape. Incluso acomodando parte de las mismas en una estructura colocada inmediatamente detrás de los asientos.
No solo eso, el motor que generalmente se colocaría justo sobre el eje trasero a la misma altura de las ruedas, se movería más adelante y enviaría su poder a través de una flecha y diferencial para de nuevo enviar más peso hacia el centro del auto.
Con esto, se reducirían los movimientos de cabeceo frontal y trasero, dando una respuesta más reactiva y predecible. También ayudaría a reducir el subviraje y en general entregaría un deportivo bien balanceado.
Actualmente el Rímac Nevera ya hace algo similar, auque claro con un enfoque extremo con más de 1,000 hp. Con esta patente Mazda reafirma su compromiso para seguir construyendo autos divertidos y disfrutables de manejar, incluso si las regulaciones los obligaran a dejar de lado los autos a combustión.
