El pasado fin de semana se llevó a cabo la edición número 30 del “Festival de la Velocidad en Goodwood” uno de los eventos mas importantes del año para los apasionados de los autos.
La historia de este festival comenzó en 1993 gracias a Lord March (Charles Gordon-Lennox) quien adquirió la finca donde se encuentra su castillo de Goodwood, un hipódromo y el tramo del “Hill Climb” para poder devolver el espectáculo del automovilismo que acogió grandes eventos entre 1948 y 1966.
Al no contar con los permisos necesarios para realizar un espectáculo de carreras,“Lord March” decidió llevar a cabo en su propiedad una selección de autos clásicos perteneciente a sus amigos más cercanos, la primera celebración coincidió un Domingo de Junio en la que se llevaba a cabo las 24 horas de Le Mans en 1993, el resultado, 25,000 asistentes.
Desde entonces el Festival de Godwood dura cada vez más días, en la actualidad comienza el día jueves y termina el domingo siguiente, es así cómo en un mismo recinto se lleva a cabo esta fiesta que va desde autos deportivos, clásicos, rallies y motocicletas, los cuales se reúnen para seguir escribiendo la historia de esta celebración, eso si, previa invitación de “Lord March”.
En esta, su edición número 30, tuvimos la oportunidad de estar presentes y disfrutar junto a los miles de fanáticos los vehículos más históricos del deporte y ser testigos de una gran variedad de autos desde Formula 1, WRC, WEC, Clásicos y de Circuito, que completaron el recorrido hasta lo más alto de la colina.
Este año la marca protagonista fue la alemana Porsche, quien está celebrando su aniversario número 75 desde que lanzo el Porsche 356, esta, es la cuarta ocasión que el fabricante cuenta con este estatus en Goodwood, los visitantes pudieron ser parte de esta fiesta aderezada de auténtico lujo y una gran cantidad de unidades, lo más selecto de la marca alemana y que pertenecen en su gran mayoría al museo de la firma.
Muchos modelos de la marca procedentes del Museo Porsche hicieron palpitar los corazones de los entusiastas, iconos como el Porsche 959 o el 917 K, ganador de las 24 horas de Le Mans en 1970 entre muchos otros, más de 40, realizaron el clásico desfile para subir la ya famosa colina hasta llegar a la escultura personalizada, que se sitúa a la entrada de Goodwood House, el palacio de la finca. Diseñada por el artista londinense Gerry Judah la cual ha sido fabricada con 50 toneladas de acero e incluye seis vehículos que representan la historia de la marca: un 356 de 1951, un 718 Fórmula 2 de 1960, un 962 C de 1990, un 911 Sport Classic de 2009, un 963 y un 911 musica de violines y pirotecnia dieron el toque final a esta celebración.
El stand Porsche Experience también fue protagonista en donde se dejó ver el Mission X una reinterpretación espectacular de un hypercar, con puertas estilo Le Mans y un sistema de propulsión eléctrico eficiente y de altas prestacciones. En este mismo escenario debutó el Vision 357 Speedster, un concept car eléctrico y descapotable, con influencias del 356.
De los momentos para recordar fue ver a Sebastián Vettel al mando del Williams FW148 con combustible 100% sostenible, mas emocionante aún, ver al alemán al volante del McLaren-Ford MP4/8 de Ayrton Senna.
Otro que se dejó ver fue el piloto mexicano Esteban Gutiérrez al volante del Mercedes Benz-AMG F1 W12 y un momento emotivo ver a Mick Schumacher a bordo del Mercedes W02 F1 de su padre Michael Schumacher con el icónico casco rojo del piloto alemán.
Por primera vez en la historia del festival los fuertes vientos obligaron a cancelar el festival el sábado, sin embargo, el domingo se reanudó el programa con normalidad para continuar la fiesta de este ya emblemático festival.