¿Qué sucede?
Antes de iniciar con esta nota quiero hacer una referencia para que conozcamos el origen de este emblemático auto llamado SIETE y que fue creado por Colin Chapman en los años 50, si leíste bien en la década del cincuenta y se sigue produciendo.
Lotus Seven Serie 1 1957
Contaba con suspensión delantera con doble horquilla y un eje trasero De Dion, montaba un motor Ford de cuatro cilindros y de 1.2 litros con válvulas laterales, capaz de entregar 40 HP. No era un motor poderoso, la mecánica muy simple y el diseño muy liviano pues pesaba un poco más de 400 kg.
La marca Lotus fabricó y comercializó el SEVEN de 1957 a 1975 y uno de sus distribuidores más importantes era un concesionario en localizado Caterham, Surrey en Reino Unido, dicho concesionario acabó comprándole el nombre SEVEN y los derechos de fabricación a Lotus Cars en 1974.
Desde ese entonces -y hasta la fecha- Caterham Seven sigue siendo considerado como un vehículo deportivo de casta, de la vieja escuela y que solo los más experimentados se atreven a manejarlo, pues es a la vieja escuela, incluso ha habido locos que le montan un V8 a ese pequeño y frágil rodaster que en buenas manos puede darle mucha pelea a Ferraris o Lambos en zonas trabadas.
Pasemos al sEVen
El Caterham EV Seven hará su debut en el Goodwood Festival of Speed 2023
Diseñado en colaboración con Swindon Powertrain Ltd, el Caterham EV Seven probará la viabilidad de un automóvil deportivo eléctrico que se mantenga fiel a las raíces de Caterham para construir autos simples -y rápidos- que sean legales para carretera y se puedan utilizar en la pista.
Basado en un chasis SV de cuerpo ancho, el EV Seven pesa solo 70 kg (casi lo mismo que un pasajero) más que un modelo de gasolina comparable, con un impresionante peso total previsto de 700 kg. Incluyendo las baterías.
El EV Seven utiliza un motor creado por Swindon Powertrain, que produce 243 HP o su equivalente de 179 kW y ofrece un torque de 184 lb ft. Eso se traduce en 0-100 mph en solo cuatro segundos y una velocidad máxima de 210 km/h que es realmente alta en un automóvil tan liviano como el Caterham.
Las baterías son refrigeradas por fluidos dieléctricos por inmersión de 40kWh (generalmente utilizado para mantener bajas las temperaturas de las computadoras muy poderosas) para mantenerse fresco. El resultado es una batería que puede hacer frente a los exigentes ciclos de calor experimentados durante una conducción deportiva y velocidades de recarga posteriores de hasta 152kWh.
Bob Laishley
El CEO de Caterham, Bob Laishley, (Ex CEO de NISMO) dijo: “Cualquier modelo EV futuro que produzcamos debe ser fiel al ADN de un Caterham: ligero, divertido de conducir y centrado en el conductor. El principal objetivo de este proyecto es desarrollar un vehículo con un reto de peso no superior al equivalente a llevar un pasajero a bordo. Nunca vamos a lanzar un Seven que pese una tonelada o más, preferimos no hacerlo.
“Construir un Seven que sea capaz de completar eléctricamente de dar un paseo de domingo por la mañana se puede lograr con la tecnología de batería actual, pero el desafío es para el uso en pista, donde el consumo de energía aumenta considerablemente. Por el momento, la refrigeración por inmersión de la batería es una de las mejores soluciones para hacer frente a los rápidos ciclos de carga y descarga que se experimentarían en una pista de carreras.
“No tenemos planes de poner el EV Seven en producción en esta etapa; es un banco de pruebas para ver qué tan bien funciona un sistema de propulsión EV para los casos de uso específicos de nuestros clientes. Estamos haciendo este proyecto con los ojos bien abiertos para que podamos aprender cómo ofrecer los atributos específicos del vehículo Caterham necesarios para un Seven: liviano, simple y divertido de conducir. Vamos a lanzarlo al mercado en el momento adecuado, cuando la futura generación de tecnología de baterías lo permita, y es por eso que ahora es el momento de probar el concepto en el hábitat natural de nuestro auto, en la pista y que mejor hacerlo en Goodwood”.