Hace alrededor de ocho años, Ford estaba buscando un lugar para construir una planta en México. El auto que se tenía pensado fabricar era el Focus y Jalisco estaba entre los estados considerados para levantar la fábrica, que se ubicaría estratégicamente cerca de Lagos de Moreno, lugar con buena infraestructura para llevar a cabo el proyecto. Pocos días antes de que se tomara la decisión final, una fuerte lluvia dejó inundado el lugar y ante posibles problemas con eso en el futuro, la marca estadounidense buscó otro sitio y lo encontró en San Luis Potosí. Más tarde el proyecto se cancelaría debido a que el mercado, a una velocidad impresionante, simplemente dejó de comprar hatchbacks del tamaño del Focus, especialmente en Norteamérica, que sería el mercado al cual la fábrica destinaría los autos. Ahora que Tesla confirmó una nueva planta en México, como siempre, muchos estados disputaron el privilegio de tenerla.
La idea inicial o era hacerla en Nuevo León, como se definió. La cercanía con Estados Unidos ayuda mucho, ya que es el mercado objetivo de todos los vehículos construido en el país. El hecho de que exista ya una fábrica, con una importante red de proveedores, también le dio cierta ventaja a Nuevo León, lugar elegido por Kia para hacer su primera planta en suelo mexicano. El estado norteño tiene también terrenos disponibles para tal, cosa que parece simple de encontrar, pero no lo es, ya que esos terrenos necesitan un muy buen tamaño y para una fábrica de alto volumen, estamos hablando de algunas centenas de hectáreas. No es todo.
La infraestructura necesaria también es muy importante. Es necesario que el terreno tenga fácil acceso a electricidad abundante y de preferencia, barata, algo que en México pudiera ser complicado en este momento, en el que se ponen trabas para la producción de energía eléctrica a empresas privadas. Globalmente hay fuerte presión para que los autos sean construidos usando energías limpias, algo que tampoco suena sencillo por aquí.
Agua también es fundamental, aunque los métodos de construcción modernos implementen el reciclado del precioso líquido, aún son necesario 4 mil litros de agua en promedio por cada auto fabricado.
Educación y comunicación
Pero luz, agua y gas no son todo y probablemente sean de las cosas menos complicadas de conseguirse. Para ser apto para la producción de vehículos, un terreno debe estar cerca de buenas carreteras, de vías de ferrocarril que tengan acceso directo al corredor ferroviario que va a Estados Unidos, además de contar con una amplia cantidad de escuelas y universidades, principalmente que ofrezcan carreras de ingeniería.
Estos puntos mencionados son los más importantes, pero hay otros detalles que van ampliando las posibilidades de que una marca se decida por un determinado lugar y entre esos está la cercanía con un centro urbano importante y las características de la población local, como el ausentismo, el nivel de sueldos y los sindicatos. Otros puntos son el clima, la distancia para la frontera, contar con hospitales, hoteles, un buen aeropuerto, de preferencia con vuelos internacionales y una serie de requisitos que aumentan o disminuyen las posibilidades de un lugar.
Un punto en que antes no se ponía mucha atención pero ahora ya lo hacen es la seguridad. Si en determinada zona ese punto es más crítico que en otras, es algo que ya se toma en cuenta.
Para un estado, ser sede de una planta automotriz genera prestigio, más que dinero, pero esa fama consecuente sí genera beneficios y uno de ellos es la atracción de proveedores. Toda la zona se beneficia del movimiento de personas y de carga y una infraestructura empieza a crearse o ampliarse ante la necesidad de consumo de restaurantes, hoteles, gasolineras, supermercados y muchos otros bienes y servicios necesarios para la vida cotidiana de los que laboran en fábricas que generan al menos un par de miles de empleos directos y tres indirectos por cada empleo.
Todos los estados quieren tener una planta automotriz en su territorio, incluso sabiendo que esto les va a costar dinero en forma del terreno, casi siempre regalado, de incentivos fiscales e infraestructura. Pero pregunten a todos los que han hecho esa inversión, incluso en gobiernos anteriores y esos la vuelven a hacer. Donde no hay ninguna, como en el sureste, se puede lograr, pero el costo será mucho, mucho mayor. La decisión de Tesla por nuevo León, fue sensata, como deben ser las decisiones de negocio.
