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Motor de arranque: Porqué los precios van a bajar o subir menos

Motor de arranque: Porqué los precios van a bajar o subir menos

La mala noticia es que dicen que cuando a Estados Unidos le da gripa, a México le da pulmonía. Pero la buena es que cuando al vecino norteño le va bien, nosotros también experimentamos algo de bonanza. En el último trimestre de 2022, el inventario de autos nuevos comenzó a aumentar en la Unión Americana. Com esto la presión por los precios comenzó a ceder un poco y ante la mayor oferta de nuevos, los seminuevos también comenzaron a demorar más tiempo en los estacionamientos de agencias y lotes, empujando los precios hacia abajo. Sí, hubo variaciones posteriores, pero la tendencia aún se mantiene en esa dirección. Entonces comenté yo que era una cuestión de tiempo para que esto pasara en México, hoy las primeras señales de esto ya están pasando.

El primer bimestre de este 2023 muestra un crecimiento importante del mercado.  En enero las ventas fueron 20.1% mayores que en el mismo mes del año pasado. La industria logró vender 94,414 unidades. Muchos pensaron entonces que en febrero el ritmo de crecimiento bajaría un poco, pero ocurrió lo opuesto: las ventas se aceleraron y el número fue 28% mayor al observado en febrero de 2022. En el bimestre el crecimiento es 24.1% mayor que en los primeros dos meses del periodo equivalente anterior.

El fenómeno es relativamente fácil de explicar. Algunas marcas recibieron inventario que no tenían antes y las listas de espera disminuyeron. Nissan fue una de las beneficiadas y no solo recuperó en diciembre el liderazgo en ventas que había perdido hasta noviembre, sino que abrieron una enorme ventaja para General Motors, en segundo lugar, que al contrario, quedó con menos autos para entregar que antes y esto produjo un mal primer mes de este año con una ligera recuperación en febrero, que debe mejorar significativamente entre este mes de marzo y abril próximo.

El hecho es que como ya hay más autos para entregar a los consumidores, las agencias tendrán cada vez menos pretextos para exigir ventas a crédito, empujar accesorios que los clientes no quieren, forzarlos a comprar garantías extendidas y aceptar colores que nunca les hubiera gustado ver en sus cocheras.

Más autos, menos precio

Con más autos nuevos disponibles en las agencias, menos personas sentirán la necesidad de buscar vehículos usados en lotes o en los departamentos de seminuevos de los distribuidores. A menor demanda, menor precio, ya lo sabemos.

Hemos visto a marcas con crecimientos muy importantes, como Mazda, por ejemplo, que terminó enero con 7% del mercado. MG, que había caído del 4.4% que terminó en 2022 a 3.7% en enero, selló un buen regreso a 4.1% en febrero. Stellantis fue de 5.9% a 7% de enero a febrero y otras también crecieron de forma importante, como Toyota que saltó de 8% a 8.9%. El nombre del juego sigue siendo inventario y el que tiene autos para entrega inmediata, va a sacar ventaja sobre el que hace esperar al consumidor. En general, vehículos híbridos, muy demandados en este momento, implicarán mayor tiempo de espera y frenarán las expectativas de un crecimiento importante de marcas que basan su gama en ellos, como Toyota y, principalmente, Lexus.

Otras marcas viven procesos de ajuste interno en el país. una de ellas es Mercedes-Benz, que está cerrando varias de sus agencias, principalmente en ciudades medianas del país. Honda también vive un momento de reorganización, que pasa por salir de segmentos de mayor volumen y adoptar una política de precios que buscan más utilidad que volumen, algo que no tiene muy satisfechos a algunos distribuidores.

Y están las chinas, que son la nueva fuerza dominante en la que se destaca SAIC, con MG. Pronto lo hará Chirey, pero también están Changan, Baic, Jac, Bestune, BYD, Jetour y vendrán otras como JMC y Great Wall, por ejemplo. Los chinos ya son la fuente desde donde más vehículos se importan a México.

La suma de estos detalles son factores que están contribuyendo para la normalización del sector, para regresar al tiempo de precios más estables. Claro que difícilmente serán menores, ya que hay una inflación real por costos de materia prima y logística, pero los “tiempos de vendedores”, estos en los que las agencias actúan como haciendo el favor de vendernos, empieza a acabarse. No se dará de inmediato, pero va a pasar y sería inteligente de parte de algunas, tratar bien sus a clientes hoy, porque los va a necesitar más pronto que tarde.

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