El mercado automotriz en México se encuentra en un franco reacomodo. Por diversos factores, hoy vemos que algunas marcas presumen crecimientos acelerados y otras van en el rumbo contrario. De pronto, los lugares que hasta hace años parecían inamovibles comienzan a ser ocupados por participantes que hasta no hace mucho eran poco menos que una anécdota.
Justo ha culminado el primer trimestre del año y es un buen momento para echarle un ojo a las ventas y con ello tratar de intuir cuál será el rumbo que la industria tomará a lo largo de 2022. Para empezar, Nissan y GM se mantienen como las marcas más vendidas del mercado y pese a que han disminuido sus ventas, aún mantienen una sana distancia con respecto al Grupo Volkswagen que ocupa el tercer escaño.
Pero justo, aquí como si se tratase de la F1 de hace un par de temporadas, es donde se encuentra lo más interesante de la tabla de posiciones, ya que los alemanes son fuertemente asechados por Toyota y KIA, que no solo mantienen una lucha encarnizada por el cuarto lugar, sino que realmente sus cifras de ventas en pleno crecimiento suponen un franco peligro para Grupo Volkswagen que en enero, febrero y marzo (-22.9%, -21.2% y -18.7 %, respectivamente) mantuvo una caída en comparación con el mismo periodo del año pasado Hasta el primer trimestre, el acumulado del consorcio compuesto por Volkswagen, SEAT, Audi, Porsche y Bentley es de 26,863 unidades, conforme a datos del INEGI.
Las alarmas en Grupo Volkswagen ya están activadas y están tratando de enderezar lo más rápido el camino. De hecho, el primer paso fue prescindir del T-Cross brasileño a favor del fabricado en India. En un caso similar, está el Virtus 2023 que pronto comenzará a ser exportado desde el subcontinente y cuya misión no solo es sustituir al anterior modelo, sino también de mantener los saludables volúmenes de ventas del Vento.
Si estos modelos tienen éxito, al mismo tiempo que la producción y ventas de Taos y Jetta se regularizan, es probable que Volkswagen pueda resistir el embate que se le avecina. Pero no la tendrá fácil ya que Toyota también acaba de realizar un par de movimientos que podrían significar una jugada maestra y el asenso en su posicionamiento en el mercado mexicano.
Toyota se encuentra celebrando 20 años en México y hemos visto como en estos últimos años el gigante que parecía haber estado dormido por fin despertó con toda la intensión de conquistar el mercado. Antes de despedirse, Tom Sullivan marcó el camino que podría llevar a la empresa a escribir un nuevo capítulo en su historia en nuestro país. Hasta el momento, el acumulado de la marca es de 23,703 unidades.
Solo hay que observar que Corolla Cross, Raize y Avanza (todos con listas de espera), que son sus últimos lanzamientos presumen una buena relación valor-precio, algo que francamente nunca fue el fuerte de los japoneses que venían de la filosofía de que “lo bueno cuesta”, lo cual no es malo, pero que no ha demostrado ser lo mejor en nuestro mercado. Solo basta ver a Honda para entender a que me refiero. Incluso Lexus, es parte de esta nueva ambición.
Tampoco significa que Toyota tenga el camino libre, ya que en realidad mantiene una lucha férrea con KIA con la que ha estado intercalando el cuarto escaño de manera constante. Los surcoreanos todavía son un suceso y pareciera que no se cansan de romper récords en nuestro país. Que una empresa con 7 años presencia en México le luche al tú por tú a una con dos décadas de trayectoria y con otra de casi 60 años es realmente loable.
Antes de escribir esta columna pude contactar a Sara Gurza, Senior Public Relations Specialist en KIA Motors México, quien me señaló que a priori el objetivo de la marca no está basado en ganar lugares, sino participación de mercado, siendo el 9% su meta para este año, algo que están a punto de lograr ya que al cierre de marzo lograron un 8.9 por ciento. Aunque eso sí, si esto en consecuencia hace que cambie el ranking, será muy bien recibido por la firma.
Durante los primeros tres meses, el acumulado asciende a 22,528 unidades (la diferencia respecto a Toyota es menos de mil unidades), siendo Rio y Seltos los principales pilares de KIA y si bien tienen problemas de suministro como cualquier otra marca, se las han arreglado para mantener una producción estable dentro de lo posible, lo cual podría ser fundamental en la batalla que los podría llevar no solo a cumplir sus objetivos sino incluso superarlos.
Con ¼ del año transcurrido, aún es muy temprano para saber como terminará el que podría ser el año más extraño de la industria automotriz no solo en México sino en el mundo. Lo único que puedo decir, es que el ascenso de Toyota y KIA podría derivar en un reacomodo, donde otro de los tres fabricantes con más tradición en nuestro país, cedería su lugar ante jugadores que hasta hace poco lucían improbables.
¿Crees que al final del año Grupo Volkswagen perderá el tercer lugar? ¿Nissan y General Motors tendrán tiempo de reaccionar? No sé ustedes, pero como espectador esto es muy interesante ya que de seguro atestiguaremos movimientos muy interesantes por parte de estos fabricantes.
