Con frecuencia veo en redes sociales que las recomendaciones hacia un auto en favor de otro se basan en el equipamiento de seguridad que ofrecen, conviene más aquel, que éste otro, es más seguro, tiene más bolsas de aire. Y estoy de acuerdo, es un aspecto fundamental para tomar una decisión de compra.
Podemos establecer que sí, entre más seguridad mejor, siempre. Pero el concepto de que un auto es seguro o no, es bastante dinámico, cuando llegó al mercado la generación pasada del Nissan Versa, hace una década, sus dos bolsas de aire y sistema de frenos ABS lo hacían el más seguro de su categoría y por lo tanto, era el más recomendable.
Hoy, diez años después se necesita bastante más que eso, de hecho, el Versa ofrece al menos 6 bolsas de aire, ABS y ESP en todas sus versiones y en la más equipada, incluso encontramos las famosas asistencias a la conducción. Nuevamente, el Versa (en su versión más costosa) sería el más recomendable si nos apegamos a la idea de que entre más seguridad, mejor. Sin embargo, actualmente hay rivales del segmento que ofrecen los niveles más adecuados de seguridad y dependiendo de los que busques, podrían resultar una mejor compra que el sedán japonés, tal y como sucede con el Onix.
En los mercados maduros; EU, Europa o Japón, existen organismos gubernamentales que establecen políticas en materia de seguridad que los autos deben cumplir, si un fabricante quiere vender sus productos en Europa, debe cumplir con las reglamentaciones de la EuroNCAP, con lo cual, los consumidores ni siquiera tienen que evaluar un auto en función de la seguridad, todos cumplen con un estándar bastante elevado.
Dichas entidades incluso tienen sistemas de ranking, para aquellos a quienes les preocupa más el tema de la seguridad, entonces, si el auto que te gusta recibió 5 estrellas de la EuroNCAP o la NHTSA de EU, puedes estar tranquilo, cumple con los estándares más exigentes que hay, o que había en el momento en que fue sometido a las pruebas de choque.
Ojo, no es tan transparente tratándose de Latin NCAP, ya que este organismo prueba el auto más básico en materia de seguridad que encuentra en toda la región y ese es el que somete a pruebas, con lo cual, el vehículo en cuestión (como ha sucedido en numerosas ocasiones) pudiera no ser exactamente como el que se ofrece aquí.
En México tenemos una regulación que tiene al menos 30 años de desfase, lo que permite a los fabricantes comercializar productos muy deficientes en materia de seguridad y aun así cumplir la norma, en consecuencia, nos toca a nosotros, los compradores, descartar aquellos productos que no cumplan con un estándar mínimo, mismo que evidentemente no será suficiente en algún momento en el futuro. Es cierto que las cosas han mejorado mucho, pero se debe tanto a la exigencia de los consumidores, como a la voluntad de los fabricantes. Y no es gracias a una normativa moderna y exigente.
¿Cuál es el estándar mínimo de seguridad aceptable?
Pareciera que la cosa es bastante lógica, y más siempre es mejor, entonces aquel que tiene 10 bolsas de aire, es más seguro y por lo tanto más recomendable que el que tiene 6. Pero al final, la seguridad también se ha convertido en uno de tantos puntos que tienen los fabricantes para hacer marketing.
Entonces, habría que definir un estándar mínimo y saber que hay elementos de seguridad más importantes que otros. Porque por ejemplo, si estás comprando un auto usado o tu presupuesto no es muy grande, va a haber cosas que definitivamente no vas a poder obtener, aunque quisieras.
Desde mi punto de vista lo mínimo que tu auto debe de tener es: frenos ABS, ESP, así como bolsas de aire frontales, laterales y de cortina, hablando de un auto familiar. Si fuera indispensable sacrificar alguno de estos elementos, es mejor tener 4 bolsas y ESP, que las 6 bolsas prescindiendo del ESP. Y para dejarlo bien claro, el Programa Electrónico de Estabilidad, DSC, ESC o cualquiera de los nombres que pueda tener, es la tecnología que más salva vidas en los autos luego del cinturón de seguridad, lo que es mejor, evita los accidentes, dentro de las leyes de la física claro está, mientras que las bolsas de aire protegen la integridad de los pasajeros cuando el impacto ya ocurrió.
A estas alturas creo que no debería ni tener que decirlo, pero jamás sacrifiques alguno de estos sistemas por tener rines más grandes, quemacocos o algún otro equipamiento, vamos a decir llamativo, simplemente no vale la pena arriesgarse.
A partir de lo anterior, como dicen por ahí, todo lo demás es “nice to have”, o más coloquialmente, todo lo que escurra es miel, pero nuevamente, hay sistemas que creo, son más importantes que otros.
Con lo fácil que es en la actualidad distraernos mientras conducimos, porque aceptémoslo todos caemos en la tentación de levantar el teléfono aun cuando sabemos que no lo debemos hacer, la alerta de colisión frontal con asistente de frenado se vuelve un aliado valioso, la alerta de presencia en punto ciego también me parece útil, claro, si es que tienes la costumbre de voltear a ver los espejos antes de cambiarte de carril y dependiendo del vehículo, por ejemplo una titánica Suburban, la cámara de reversa resulta necesaria, aunque la de 360° es bien recibida.
El resto, como podrían ser: el asistente de abandono de carril, la alerta de tráfico cruzado, sistema de visión nocturna, control de velocidad crucero con stop & go y tantísimos más, creo yo, no son indispensables
Para resumir, si tiene al menos: 6 bolsas de aire, ABS y ESP ya cumple con lo necesario y puedes estar seguro que estás siendo responsable en ese apartado, por lo demás, se trata de que el auto se adapte a tus gustos, necesidades y presupuesto.