La KTM Super Duke 1290 es una de las naked más radicales del mercado, tanto por su estética como prestaciones. Ya en 2020 recibió varios cambios importantes, como una reducción de peso, revisión del motor y la inclusión de una nueva electrónica, pero ahora, en el marco del EICMA de Milán, la firma austríaca renueva la gama con la incorporación de suspensiones semiactivas de segunda generación y la llegada de una variante más agresiva llamada EVO.
Esta nueva suspensión WP Apex permite adaptar la moto al tipo de conducción que se va a realizar, gracias a los tres modos de funcionamiento: Comfort, Street y Sport, todos de serie. Con ello, la precarga del amortiguador trasero puede ajustarse desde la pantalla hasta en 20 mm (10 posiciones de 2 mm cada una).
La nueva versión KTM Super Duke 1290 EVO añade a ellos otros tres modos de ajuste: Track, Advanced y Auto. El primero está diseñado para su uso en circuito suponiendo el ajuste más rígido. El segundo, permite seleccionar el nivel de amortiguación de ambos trenes en una escala del 1 a 8 para lograr la máxima precisión en los reglajes, y el modo Auto se adapta automática a los diferentes tipos de terreno sin interferir en la marcha.
Por su fuera poco, hay otros tres ajustes automáticos de nivelación de precarga: LOW, STANDARD y HIGH. Con ellos, de manera automática, la suspensión se ajusta en función del peso del piloto.
Otra novedad de la EVO es la función antimuelleo, con la que es capaz de mantener la altura del tren delantero en las frenadas más fuertes.
KTM indica que esta nueva suspensión sólo añade dos kilos al peso de la moto, quedando en total con 191 kilos.
El resto no cambia en la 1290 Super Duke R. Cuenta con los modos de conducción RAIN, STREET, SPORT, además de los opcionales TRACK y PERFORMANCE, que son capaces de minimizar la acción del control de tracción y el anti-wheelie, además de mejorar la respuesta del acelerador.
El motor sigue siendo "La Bestia": el LC8 bicilíndrico en V a 75º de 1,300 cc que rinde 180 Hp de potencia se mantiene inalterado. También los frenos Brembo, los escapes Akrapovic y toda la tecnología que conocemos de la marca. Eso sí, se le ha añadido una nueva toma de aire dinámica en el frontal para maximizar el flujo de aire que llega a las cámaras de combustión.
Las KTM 1290 Super Duke R y EVO se ofrecerán en dos combinaciones de color: azul-naranja y blanco-plata, mientras que el clásico chasis y llantas color naranjo de las motos R se mantiene igual.
La nueva 1290 Super Duke GT
La versión sport-tourer de la 1290 Super Duke hereda las mismas mejoras técnicas de su hermana R, incluyendo la suspensión semiactiva WP Apex, aunque configurada para disfrutar de rutas largas, ofreciendo un funcionamiento muy intuitivo.
El sistema permite al usuario escoger entre cuatro modos: Rider (solo piloto), Rider & Pillion (piloto con pasajero), Rider & Luggage (piloto con equipaje) y Rider, Pillion & Luggage (piloto con equipaje y pasajero); y también equipa la función “anti-dive” para prevenir el muelleo de la horquilla en frenadas bruscas.
Por supuesto que la ergonomía es muy distinta que en las R y EVO, ya que ofrece un chasis con centro de gravedad más alto, una carrocería con formas anguladas, un carenado más envolvente, y un depósito de 20 litros, cuatro más que en la R. En la parte trasera, el diseño del subchasis ofrece más espacio para el pasajero y la instalación de maletas.
Se suma una pantalla de TFT de 7 pulgadas con el nuevo sistema de navegación llamado Turn-by-turn PLUS (TBT+), nuevo en la marca, y disponible en la app KTM Connect. Cuenta también con tecnología SYGIC, lo cual permite que funcione sin conexión a internet, y cuenta con sistema de búsqueda avanzada.
El motor, en tanto, sigue siendo el mismno LC8 de 1,300 cc de KTM, aunque en este caso con "sólo" 175 Hp de potencia.