Poco a poco los fabricantes de automóviles van entrando en la moda de la electrificación, CUPRA, la joven marca que hasta hace no mucho tiempo servía para denominar las versiones deportivas de SEAT, ahora es punta de lanza en la estrategia de autos eléctricos.
Actualmente, el 50% de las ventas de CUPRA en el viejo continente son ya de modelos electrificados, es decir plug-in hybrids y esa proporción no hará más que seguir incrementándose, con la llegada del Born, primer modelo 100% eléctrico de la firma.
En México, aun cuando CUPRA ha resultado un éxito rotundo, estamos muy lejos de poder presumir de lo mismo, y aunque ya se analiza la llegada de modelos híbridos, el CUPRA Born no parece ser parte de los planes para nuestro país en el corto plazo.
Antes de pasar a los detalles, si el nombre te suena es porque en el pasado Auto Show de Ginebra de 2019, SEAT presentó el concepto eléctrico el-Born, si con “el” al principio… Resulta que al final, el modelo paso de ser SEAT, a CUPRA.
¿La razón? Principalmente, costos, los eléctricos todavía son caros, con lo cual, CUPRA está en mejor posición para comercializar un eléctrico que SEAT. Al final, la filial deportiva lo bautizó simplemente como Born.
Por cierto, el nombre toma inspiración en el antiguo y en la actualidad muy trendy barrio de “el Born” en la ciudad de Barcelona, donde se ubica la icónica Catedral de Santa María del Mar.
CUPRA Born: Motor y características técnicas
El CUPRA Born, emplea la nueva plataforma MEB de Grupo Volkswagen desarrollada exprofeso para autos eléctricos, misma que ya utilizan otros vehículos del consorcio como los Volkswagen ID.4 y ID.3, así como el Audi Q4 e-tron.
Aunque es un hecho que más modelos se irán integrando en los años siguientes. Una de las particularidades más interesantes es que el motor eléctrico y por ende, la propulsión, van en el eje trasero. De acuerdo con los ingenieros, esto provocó muchas discusiones al interior del consorcio teutón.
Ya sabemos que la batería va montada en el piso, pero las aplicaciones de menor tamaño concentraban mucho peso adelante, con lo cual se perdía control en el eje trasero al momento de manejar, la solución fue colocar el motor grande atrás (hay aplicaciones con un motor pequeño adelante) y así se consigue una distribución de peso muy cercana al 50% en cada eje.
El CUPRA Born llega inicialmente con dos opciones de batería, la primera es de 58 kWh y que anuncia una autonomía para el ciclo WLTP de 424 km y otra de 77 kWh, con un sorprendente rango de 540 km. Más adelante llegará una variante con batería de 45 kWh y autonomía de 340 km.
En cuanto a prestaciones, hay tres niveles de potencia, 147 hp, 201 hp y el más potente, denominado e-Boost con 227 hp y que estará disponible en el transcurso del año que viene. En todos los casos el torque es de 228 lb-pie.
Cabe señalar también que el paquete e-Boost incluye frenos delanteros más grandes y el modo de conducción CUPRA.
CUPRA Born: Diseño
La transición a la marca CUPRA le trajo al Born algunas modificaciones estéticas que le vienen de maravilla, y es que si bien, sabemos que comparte muchos componentes con el Volkswagen ID.3, lo que se ve no se juzga y el CUPRA Born es mucho más atractivo.
Para empezar, es más bajo y la parte frontal con trazos mucho más marcados, decoraciones en color cobre y la parrilla en negro brillante le confieren una apariencia bastante más agresiva.
Si a lo anterior sumamos los rines opcionales de 20” en combinación negro mate y cobre, o bien otros de diseño negro combinados con tono metálico pulido que además lucen como de prototipo de Le Mans, se entiende el porqué de que el Born sea mucho más agraciado que el ID.3.
Las proporciones son algo atípicas, si bien es un hatchback, el cofre es muy corto y con el parabrisas tan grande y tendido, tiene cierto aire de monovolumen, luego el toldo va cayendo y la resolución trasera, sin ser demasiado vistosa redondea esa apariencia de robustez y deportividad que buscaba la marca.
CUPRA Born: Interior
Puertas adentro el Born luce muy alineado con otros modelos de CUPRA, pero al mismo tiempo luce moderno y minimalista. La pantalla central táctil es de 12”, como ya vimos en el CUPRA León por ejemplo, ya no cuenta con botones físicos para controlar el volumen o el climatizador automático, son mandos touch.
Evidentemente es compatible con Apple Carplay y Android Auto, además tiene conexión 4G, navegación 3D, entre otras funciones. La pantalla es brillante, pero la interfaz podría ser más rápida.
El clúster de instrumentos es un pequeño display de 5.3” en donde se despliega información muy reducida, velocidad, autonomía y no mucho más. Hacia la izquierda de esta pantalla encontramos el mando de la transmisión, en un formato que se asemeja a la solución que habíamos visto anteriormente en el BMW i3. Es una palanca muy fácil de operar, además de las tradicionales posiciones de Drive, Reversa, Neutral o Parking, en la misma dirección en la que seleccionas Drive, si la accionas por segunda ocasión, puedes activar un modo B, que activa un modo de regeneración más potente.
La elección de colores, texturas y materiales es por demás interesante, hay fibras en paneles de puertas o reposabrazos central que parecen alcántara, mientras que otras como las que van detrás del clúster y a un costado de la consola central, que tienen tacto acolchado y una textura que parece como de traje de buzo, neopreno pues.
Hay decoraciones, costuras y aplicaciones por doquier en color cobre y otro aspecto que llama la atención es que se trata de una cabina con muy pocos botones.
Pero el interior del Cupra Born no solo es moderno o atractivo, también emplea materiales reciclados tanto en asientos, como alfombras y alguno que otro componente adicional. Vaya no solo es ecológico por dejar emitir emisiones contaminantes, sino también por utilizar muchos materiales sustentables.
CUPRA Born: Manejo
Tras el volante, el CUPRA Born se percibe ágil y es que, según cifras oficiales, el 0 – 100 km/h se realiza en 6.6 segundos con el paquete de baterías de 58 kWh, la versión que me tocó probar era justo esa, con el motor de 147 hp.
Como buen eléctrico, las reacciones son muy rápidas y en cuestión de instantes, ya rueda a velocidades de autopista, todo eso sin emitir sonido alguno. Pero ya esperaba que el Born acelerara con rapidez, lo que no me esperaba es que el manejo fuera tan agradable.
La dirección es rápida y retroalimenta bien, como esperarías de un CUPRA, la visibilidad es inmejorable, producto de un poste A dividido en dos, con un vidrio adicional.
Por su parte, la calibración de la suspensión presenta buen balance entre rigidez, para ir bien plantado en curvas, pero no tanto como para castigar a los ocupantes en trayectos prolongados. Te diría que está a medio camino entre el ajuste suave del SEAT León y la rigidez del CUPRA León.
La ruta dio inicio en Sitges, localidad que está a las afueras de Barcelona y hacia una zona montañosa en la periferia de la ciudad, para luego culminar en la zona centro, en Paseo de Gracia. Tuvimos algo de autopistas, carreteras secundarias, curvas, subidas y bajadas.
Hubo dos aspectos a criticar, por un lado, los frenos, que no se sienten tan potentes como todos los demás CUPRA que he manejado, quizá porque se trataba del modelo de entrada, pero como sea, se extraña esa contundente capacidad para detenerse efectivamente una y otra vez.
Y la segunda sería el ligero ruido de viento que se produce por encima de los 120 km/h, que en realidad no llega a ser molesto, pero está ahí, y considerando que no hay componentes mecánicos (motor y caja) que aporten ruido y vibración, el CUPRA es suficientemente silencioso.
La verdad es que no me fijé mucho en cuántos kilómetros recorrimos, lo sé, muy mal de mi parte, pero estaba más atento de las curvas, las frenadas y encontrar un buen spot para hacer algo de fotos y video. Pero unos 100 – 120 kilómetros si recorrimos.
Como sea, cuando iniciamos la bajada del paso de montaña hacia Barcelona, activé el modo de regeneración más intenso y así me fui hasta finalizar la ruta. Al llegar mi auto marcaba 310 km de autonomía, con lo cual, el rango estimado por la marca sería bastante cercano a la realidad.
CUPRA Born: Conclusión
El CUPRA Born es una prueba más de que la electrificación está sobre nosotros, ya sea por diseño, desempeño, conectividad o cualquier otro parámetro, es un auto perfectamente funcional y que, pese a que ya no tiene motor de combustión, mantiene esa identidad pasional que tan bien ha logrado conceptualizar la marca.
Y esto apenas inicia, ya que en 2024 la marca iniciará ventas de su segundo modelo eléctrico, el Tavascan, que es un SUV súper llamativo y exclusivo de CUPRA, lo que quiere decir que al igual que con el Formentor, no existirá una versión SEAT de ese modelo, por si fuera poco, un año más tarde llegará un nuevo eléctrico urbano inspirado en el UrbanRebel Concept, más o menos del tamaño del Ibiza y será fabricado en Martorell, junto con las variantes para otras marcas del consorcio.
¿Veremos al CUPRA Born en México? Pronto, no creo, quizá antes llegue alguna versión plug-in del Formentor o Ateca, pero de que la marca está lista para ofrecer toda una gama de vehículos electrificados, no queda duda. Ahora falta lo más difícil, que nuestro mercado esté listo.
CUPRA Born - Un eléctrico muy atractivo y con mucha personalidad