Aunque esta noticia ya tiene sus buenas semanas de sabida dentro de medios más afines a los videojuegos, hace poquito finalmente se concretó la compra de Codemasters por parte del gigante Electronic Arts, por la suma de 1.2 billones de dólares, la suma más alta que EA ha gastado a la hora de hacerse con alguna empresa. Esto tiene bastante relevancia con la cantidad de títulos relacionados con el mundo de los autos
De Electronic Arts, es de sobra sabido que son dueños de la franquicia de Need For Speed, Real Racing y Burnout, juegos con enorme reconocimiento y popularidad, en especial si hablamos de NFS, prácticamente un referente absoluto. Por el lado de Codemasters, llegan juegos de peso, que están orientados a disciplinas del motorsport, como es el juego oficial del WRC y de la F1, así como DIRT y GRID, ambos sucesores de los exitosos Colin McRae Rally y TOCA de los noventa.
La espalda de Electronic Arts obviamente ayudará a que los juegos de Codemasters tengan una mayor difusión y tengan nuevas características. Por otro lado, el éxito de Codemasters con sus juegos, podría ayudar a refrescar los títulos de EA, especialmente el caso de Need For Speed, que aunque en lo personal, me han gustado muchos sus últimas entregas, no han alcanzado el impacto de juegos anteriores, perdiendo terreno ante nuevos rivales como ha sido el caso de Forza Horizon.
Aparte, los juegos con licencia oficial de la FIA, permitirán a Electronic Arts meter sus manos en el mundo del eSport y tener algunos juegos importantes de estos que salen año a año y que obviamente son una fuente de ingresos bastante importante.
Y no menos importante: la cartera de juegos de Electronic Arts crecerá notablemente y hará más atractiva la oferta de EA Play, el servicio de suscripción multiplataforma de la empresa canadiense.