En menos de media década los ambiciosos planes de electrificación de muchas marcas se vinieron abajo, ya sea por cambios en las políticas internas de sus países o regiones, o bien, por la baja demanda que ha experimentado este mercado en los últimos dos años. La más reciente víctima de ello es la Ford F-150 Lightning, que oficialmente detuvo su producción.
Hace meses, la primera pick up 100% eléctrica de Ford tuvo que pausar su producción debido a la baja demanda, que acumulaba unidades en los patios de los distribuidores en Estados Unidos, y sin un cambio pronto en esta situación, se optó por mejor finalizar su fabricación y moverse hacia otra variante de la electrificación automotriz, que quizá la hará más exitosa.

Al mismo tiempo que se anunció el adiós de la Lightning, la firma del óvalo azul confirmó que ya trabaja en el desarrollo de una nueva camioneta de trabajo electrificada, que será lanzada al mercado con un tren motriz eléctrico de rango extendido, es decir, portará un pequeño motor de combustión interna, que fungirá como generador de electricidad, para elevar el rango de autonomía de la camioneta.
La información que diversos medios estadunidenses recogen de la compañía señala que esta nueva F-150 seguirá teniendo motores eléctricos para su propulsión, al tiempo que al integrar el generador, se podrán colocar baterías de menor tamaño (lo que reducirá el costo de producción y el peso de la pick up), además de eliminar la ansiedad de los conductores por la posibilidad de quedarse sin electricidad en sus autos antes de encontrar un cargador.
Este sistema seguirá teniendo la tecnología Vehicle-to-Home (V2H), que permite que el vehículo pueda alimentar de energía la casa en casos de emergencia, como ya sucedió en febrero de 2021 cuando una tormenta invernal dejó sin electricidad a muchas comunidades en Texas y los dueños de autos eléctricos pudieron enchufar su hogar al auto.
