En el marco de los festejos por su 75 aniversario, la Carrera Panamericana hará historia al integrar por primera vez un vehículo autónomo en su recorrido. Esta iniciativa que busca impulsar soluciones de movilidad más limpias, seguras y sostenibles tanto para México como para América Latina, surge de la colaboración entre el Tecnológico de Monterrey y el Politécnico de Milán.
El proyecto, liderado por el Dr. Jorge de Jesús Lozoya Santos, representa un avance significativo en el campo de la movilidad inteligente. "Llevar esta tecnología a un entorno tan exigente como La Carrera Panamericana nos permitirá obtener datos valiosos para acelerar la adopción de sistemas autónomos en nuestras ciudades", afirmó.
La participación de un convoy autónomo, compuesto por un vehículo líder y una unidad autónoma, ofrece una experiencia única. Este escenario real permite la prueba de tecnologías avanzadas como la inteligencia artificial, sensores de última generación y sistemas de control autónomo en condiciones de carrera. Esta colaboración transforma a La Carrera Panamericana en un verdadero "laboratorio en movimiento".
La alianza estratégica entre el Tecnológico de Monterrey y Maserati México es un pilar fundamental de esta iniciativa, ya que un Maserati GranCabrio Folgore 2025, equipado con percepción avanzada mediante inteligencia artificial, interacción hombre-vehículo cognitiva y comunicación vehículo a vehículo, desarrollado conjuntamente por el Tec y PoliMi, guiará al vehículo autónomo.
El GranCabrio Folgore es impulsado por tres motores eléctricos, uno en el frente y dos en la parte trasera, los cuales permiten generar un efecto de torque vectoring activo. Este tren motriz de 800 volts puede entregar 740 Hp y 996 Lb-pie de torque de manera continua, pero por algunos segundos, aumentar esa potencia a 818 Hp de un golpe. Toda esa potencia se gestiona a partir de algunos modos de manejo: GT, Sport, Corsa y Max Range. Los 100 km/h los logra en 2.8 segundos y puede alcanzar una velocidad de 290 km/h, cifras impresionantes para un auto que pesa 2,340 kilos, lo que también implica un gran trabajo de frenado del sistema Brembo que equipa este auto.
