Este sábado 1 de febrero de 2025 el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó un decreto para cargar 25% de aranceles a todos los productos que México y Canadá exporten a su país, así como un 10% extra para las exportaciones de China.
Estos impuestos, que comenzarán a aplicar a partir el martes 4 de febrero, ya habían sido advertidos por el mandatario estadunidense desde hace varios meses, si los países a los que se les impusieron, no cumplían con sus demandas.
Del lado de la industria automotriz, se prevé que con esta medida los vehículos fabricados en México y Canadá tendrán un incremento de 3,000 dólares para los consumidores estadunidenses, lo que significaría una reducción de 1,000,000 de unidades vendidas en ese país.
La manufactura de vehículos en Norteamérica está tan interconectada, que los expertos afirman que muchas autopartes cruzan las fronteras hasta 8 veces antes de tener un vehículo 100% finalizado, pues los proveedores están instalados en los tres países, lo que elevará estos costos significativamente.
México se ha vuelto un lugar clave de proveeduría para varias plantas automotrices en Estados Unidos, y tan sólo en 2023, esta actividad representó más de 35,000,000,000 de dólares en exportaciones de nuestro país al vecino del norte.
Además, los expertos también afirman que es posible que se pierdan empleos en el sector.
En México fabrican vehículos Audi, BMW, Ford, General Motors, Honda, JAC, Kia, Mazda, Nissan, Infiniti, Mercedes-Benz, Stellantis, Toyota y Volkswagen, y todas, salvo JAC, exportan modelos a Estados Unidos, por lo que habrá que ver en estos días cómo reaccionan ante los aranceles.