Parece que poco a poco las marcas van despertando del sueño eléctrico al que, como estamos siendo testigos, la industria se adelantó. Y es que en mercados de primer mundo, sobre todo, la llegada y oferta de este tipo de vehículos se llegó a tomar incluso, como una imposición sin tener en cuenta las repercusiones. Los clientes reaccionaron y una de las consecuencias es la baja demanda actual y una inversión multimillonaria en desarrollo que ve poca ganancia.
Pero nunca es tarde para recapacitar y muchas marcas están pausando la “transición”, las premium incluidas, y una de ellas es Bentley, ahora bajo el mando de Frank-Steffen Walliser, un ejecutivo con 29 años experiencia en Porsche cuyo primer paso en la marca británica fue frenar todo lo que tuviera que ver con electrificación y priorizar las tecnologías híbridas como “ayuda” a los motores de combustión y al medio ambiente, obviamente tomando como guía la voz del cliente que, en este caso, sigue decantado por las sinfonías de los V8.
Walliser, quien fue la mente maestra en el desarrollo del hypercar 918 Spyder Hybrid, también comenzó a trabajar con los combustibles sintéticos sostenibles, los cuales afirma que fungen como “refuerzo” a la tecnología híbrida, y con gran beneficio ambiental:
“Los híbridos son definitivamente algo más que una tecnología novedosa que sirve de puente entre ambas tecnologías. Es una solución realmente buena y puede funcionar para muchos clientes, puede satisfacer sus necesidades. El objetivo es reducir la huella de CO2 y estoy completamente convencido de que con los combustibles electrónicos se puede cerrar esa brecha, porque se puede reducir el CO2 que entra en el ciclo y no añadir más CO2 al medio ambiente”.
Frank-Steffen Walliser, director ejecutivo de Bentley.
Como es lógico, Bentley es una de esas marcas que no tiene margen de error en la estrategia de modelos y/o variantes. Tener un mismo modelo con opciones eléctricas y a gasolina dentro del mismo catálogo “no es negocio” para ellos, es por eso que Walliser ha tomado la decisión de enfocarse en los PHEVs y seguir trabajando con los combustibles sostenibles, terreno en el que Porsche tiene ya bastante terreno ganado.
Pese a todo, Walliser afirma que el primer Bentley totalmente eléctrico verá la luz en 2026, mientras que para mediados de la década 2030, la marca estará lista para ser completamente eléctrica.