¡El Dodge Charger 2024 eléctrico pasa de los 600 hp, habrá opciones a gasolina y mucho más!

El mundo está cambiando y hasta los autos más tradicionales del mundo están entrando a una nueva era. Para los muscle cars, la electrificación parecía ser su antítesis, sin embargo, Dodge en vez de buscar la forma de evitarlos, decidió ser la primera en adoptar por completo esta nueva era para su muscle car por excelencia Es así que tras casi 20 años sin cambio generacional, por fin vemos un cambio radical con el Dodge Charger 2024 que seguramente veremos en México.

De primera instancia debes de saber que no habrá más modelos con motor V8, eso queda totalmente descartado, pero afortunadamente para algunos, además de las variantes eléctricas —que por ahora serán las más potentes—, también habrá modelos con motor a combustión y hasta una variante sedán que llegará en 2025.

Otra cosa muy importante a considerar es que el Charger de nueva generación también toma el lugar del Challenger, es decir, tendremos un Charger sedán y un Charger coupé. También debes saber que los Charger Daytona serán los modelos eléctricos, los modelos a combustión solo llevarán el nombre de Charger, a secas.

Potencia y desempeño de los modelos eléctricos

Esta nueva generación estrena absolutamente todo. De primera instancia lleva una nueva plataforma que puede ser usada para un auto eléctrico, pero también permite albergar un tren motriz a combustión. En esta primera oleada de la nueva generación solo tendremos los modelos R/T y Scat Pack, ambos con una arquitectura de 400-volts.

Sin embargo, en los próximos meses y años veremos modelos con arquitecturas más capaces de 800 volts y hasta una transmisión de dos marchas para dosificar mucho mejor el par. Esta variante más extrema  será conocida como la “Banshee”, pero por ahora no hay cifras concretas.

De los que Dodge sí presentó todos los detalles fue de los modelos R/T y Scat Pack que ya mencionamos. El R/T entrega hasta 496 hp (370 kW) y 404 lb-pie de par (548 Nm), todo con un kit de mejoras a través de software y un poco de hardware que le añaden 40 hp a su poder base con lo que el 0-96 km/h le toma solo 4.7 segundos, mientras que el cuarto de milla lo cumple en 13.1 segundos. Su velocidad punta es de 221 km/h.

La variante Scat Pack, de serie ya cuenta con la mejora de nivel 2 con lo que su poder se eleva hasta los 670 hp (500 kW) y 627 lb-pie de par (850 Nm). Este nivel le permite hacer el 0-96 km/h en solo 3.3 segundos. El cuarto de milla lo completa en 11.5 segundos. Su velocidad punta es de 216 km/h, sí curiosamente un poco menor a la del modelo menos potente.

Ambos modelos hacen uso de una batería de 100 kWh que por su tamaño y demás elementos, hacen que el auto en su configuración más pesada marque unos sorprendentes ¡2,648 kg!

En autonomía por carga hay grandes diferencias, pues el modelo R/T puede cubrir unos 510 km por carga acorde a la marca, mientras que el más potente Scat Pack, se queda en 418 km. Ambos pueden cargarse del 5% al 80% en 6.8 horas en un cargador de nivel 2. Mientras que en un cargador rápido de 350 kW, les toma lograr lo mismo, solo 32 minutos.

En cualquier caso para los que extrañen el rugir de los motores, la marca ha incorporado en estos modelos el sistema Fratzonic Chambered Exhaust que en las palabras más simples posibles, se trata de una bocina en la zona baja del auto que producirá sonidos similares a los de un motor y lo podrá hacer al mismo nivel de ruido que generaba un V8 Hellcat. Eso sí, si no quieres hacer ruido lo puedes desactivar fácilmente con un botón.

Para que la diversión no pare, Dodge desarrolló varios modos de manejo que van desde los tradicionales: Auto, Eco, Sport, Mojado/Nieve, hasta Track. Mismos modos que podremos seleccionar con un botón en el volante. De igual forma, cuenta con Launch Control y Line Lock para quemar llanta antes de un arrancón.

Exclusivo para los dueños de los Scat Pack y modelos superiores a futuro, se añadirán los modos Donas y Drift. Con el modo Donas literalmente el diferencial de deslizamiento limitado trasero trabajará de una mejor forma para permitir estas maniobras con menos esfuerzo.

El modo drift simplemente ayudará controlando el poder de ambos motores eléctricos para mantener el derrape con mayor facilidad, incluso puedes elegir entre tres niveles de ángulo para estas maniobras, tanto te ayuda que hasta suaviza la suspensión delantera y endurece la trasera.

Opcionalmente los dueños del Scat Pack pueden pedir el paquete para pistas “Track Package” que añade frenos Brembo con discos de 16”, más seis pistones al frente y cuatro atrás. Las llantas se cambian por unas Goodyear Eagle F1 Supercar 3 de 305 mm al frente y 335 mm en la parte trasera. Lleva suspensión adaptativa, cámaras para grabar tus vueltas en pista o simplemente para funcionar como dash cam.

Otras opciones que se podrán adquirir serán de insertos al interior en gamuza y fibra de carbono, mejores sistemas de audio, camáras para la visión de 360° y hasta un head up display.

Calma, estos son los datos de los modelos a combustión

Para que los que no están de acuerdo con la electrificación puedan respirar, Dodge mantuvo vivo el Charger con motores a combustión. Usarán el nuevo motor Hurricane de Stellantis, un 6 cilindros en línea  biturbo de 3.0 litros que ya han portado modelos de Jeep y RAM en los últimos años.

Este nuevo motor es capaz de entregar algunas cifras que superan a los modelos V8 base de su momento, por ejemplo los Charger base entregará 420 hp, mientras que el V8 más accesible de antes entregaba 375 hp. Por cierto, ese modelo lleva el nombre de Charger Sixpack S.O.

El siguiente nivel de poder es para el Charger Six Pack H.O. que usando este mismo motor con ciertas modificaciones es capaz de elevar el poder a los 550 hp y superar así lo que entregaba el Hemi de 6.4 litros completamente atmosférico por una cifra de 65 hp. Desafortunadamente, la marca no reveló más datos de estas variantes, se centraron más en presumir las de los modelos eléctricos.

Apariencia y medidas

La imagen de este nuevo muscle car se mantiene fiel a lo que vimos en el concepto que conocimos hace cerca de un año, sin embargo, aunque las fotos no nos digan mucho, cuando leemos las medidas nos damos cuenta que es un auto sumamente grande.

Los modelos coupé miden 5.2 metros de largo, la distancia entre ejes crece a 3 metros de largo, mide 1.4 metros de alto y su anchura es de 2.1 metros. Hablamos de una distancia entre ejes más grande en 2 cm, también otros 2.3 cm de largo y 12 cm más ancho.

Una forma de diferenciarlos más fácil es el cofre, en el que los modelos eléctricos tendrán la “R Wing” que básicamente se trata de un perfil más aerodinámico que se esconde al frente para permitir una mejor eficiencia, mientras que los modelos a combustión simplemente tendrán un cofre plano.

Cómo vimos en el concepto, las formas cuadradas dominan por todos lados, con ciertas líneas en los costados y parte trasera que realmente rinden homenaje a los modelos de los 70. Acorde a la versión veremos emblemas, contrastes distintos y hasta rines de entre 18” a 20”.

Por dentro la historia es completamente distinta, ahora con una cabina que se ve mucho más futurista con pantallas enormes. Son 12.3” para la pantalla central que ya corre el nuevo sistema operativo Uconnect 5. Los modelos R/T llevarán un cuadro de instrumentos digital de 10.25”, mientras que los Scat Pack crecen a 16”.

De serie llevarán asientos en tela o piel sintética, con el tapizado de piel genuina Nappa como una opción, así cómo los asientos de corte deportivo.

Dodge no reveló precio alguno, sin embargo, para los modelos a combustión esperamos una etiqueta que ronde desde los $1.1 millones de pesos, mientras que los eléctricos rondarán entre $1.5 a $2.1 millones de pesos si los comparamos contra los modelos a combustión que aún se ofrecen en México.

En Estados Unidos los Charger eléctricos comenzarán sus ventas este mismo 2024, mientras que los de combustión llegarán a inicios de 2025, con la variante sedán haciendo su aparición hacia la primavera de 2025. Es más que probable que los veamos llegar a México, por lo que apuntamos a un estreno entre finales de 2024 y mediados de 2025.