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Prueba de Manejo

Toyota Corolla Cross Hybrid, a prueba: espacio de camioneta con consumos de hatchback urbano

Pusimos a prueba a la versión híbrida de esta camioneta y te contamos todo lo bueno y lo que podría mejorar.

Toyota Corolla Cross Hybrid, a prueba:  espacio de camioneta con consumos de hatchback urbano

El Toyota Corolla Cross Hybrid es como una barrita de avena baja en azúcar en un mar de donas, panqués y galletas. No es el bocadillo que le encanta a tus sentidos y que te hace salivar, pero en el fondo sabes que es el que mayores beneficios te va a dar. Con un tren motriz, super eficiente, un manejo cómodo y equipo más que suficiente, creo que tiene lo necesario para ser la elección más sensata de su grupo.

 

Arranquemos con el golpe más fuerte, el precio. Esta variante híbrida cuesta $598,600. Un precio que no suena nada bajo, pero que cuando analizas todo lo que te da, comienza a hacer mucho sentido, especialmente cuando veas que tus consumos de gasolina se van por encima de los 20 km/l.

Para ir desmenuzando a esta camioneta vámonos por partes y arranquemos con el exterior. En este caso la versión híbrida se basa en la variante LE, un acabado intermedio en la gama global y que por lo mismo nos da una imagen bastante discreta.

Por fuera tenemos unas formas sencillas, suaves, con faros LED algo largos, parrilla contrastada en color negro, un ligero símil de protector de bajos, plásticos negros en las salpicaduras, rines de 18” en un acabado más atractivo que el clásico plata opaco.

Todos los Corolla Cross llevan quemacocos y miden 4,46 metros de largo, por lo que ya es una camioneta compacta, aunque en el espectro más pequeño de ese grupo. Ok, no es que se te pegue la mirada como a un Mazda CX-30 o que se vea tan cuadrado como un Taos, simplemente es un diseño sencillo y para cómo van las cosas en México, creo que incluso entre más discreto mejor, aunque no enamore a la vista.

Interior sencillo, amplio y que no se da rodeos innecesarios

Por dentro tenemos un diseño que bien hace homenaje a su nombre. Y es que al ser la versión camioneta del Corolla, realmente comparte mucho con el sedán sobre el que se basa y es que prácticamente toda la parte superior es la misma.

 

Tenemos la misma pantalla, cuadro de instrumentos, controles de A/C, volante, entre otros. En general se percibe bien, tiene materiales suaves y el ensamblado me parece que está bien logrado, aunque sin duda alguna las puertas me parecen muy sencillas y en general a nivel estético no propone mucho que digamos. De nuevo, aquí se prioriza la función antes que la forma, habrá quienes amen esa simpleza y otros a los que les gustaría algo más atractivo.

A pesar de ello y de ser una variante LE, el equipo está más que bien, tenemos la pantalla de 8” compatible con Apple CarPlay y Android Auto, a/c automático de una zona, asientos en tela, cuadro de instrumentos análogo con pantalla de 4.2” a color, ajuste de profundidad y altura en volante, espejo electro crómico y sistema de audio de 6 bocinas. Realmente lo necesario para el día a día.

 

Ya cosas como el cargador inalámbrico para el celular, los asientos en piel y de ajuste eléctrico se reservan para la versión tope XLE, aunque pierdes el tren motriz híbrido. Aquí creo que ya me gustaría ver cosas como CarPlay inalámbrico, iluminación ambiental y un techo panorámico, no porque sea esencial, pero sí para actualizarlo un poco más ante lo que vemos en la mayoría de sus rivales. Aún así, está bien lo que ofrece.

 

En términos de seguridad comencemos diciendo que tiene 9 bolsas de aire, frenos ABS, ESC y cámara de reversa. Además de ello suma elementos de la suite de asistencias avanzadas de Toyota cómo: control de velocidad crucero adaptativo, freno autónomo de emergencia, mantenimiento de carril y luces altas automáticas. Realmente solo me falto tener el monitor de punto ciego y el asistente de tráfico cruzado en reversa, que de nuevo se reserva para la versión XLE.

El espacio es otro de sus puntos fuertes y es que con formas anchas y cuadradas para la cabina, puedes ir cómodamente en la segunda fila con espacio para todos lados. Incluso la cajuela está muy bien aprovechada y tiene capacidad de 349 litros al menos hasta dónde llega la cubierta de privacidad, si la quitamos tienes más de 500 litros sin problema alguno.

Sorpresivamente con punch y una eficiencia envidiable

La mecánica del Corolla Cross Hybrid es más que interesante y es que monta un sistema híbrido mucho más potente que el de Prius y Corolla Hybrid. En este caso es el motor de 2.0 litros atmosférico de 4 cilindros con 150 hp y 139 lb-pie de par, que por su cuenta ya está en el rango del segmento, sin embargo, al combinarlo con el sistema eléctrico su poder total escala a los 196 hp.

Además, la colocación del motor eléctrico, permite que tenga tracción 4WD cuando sea necesario por falta de agarre o para darnos el impulso extra bajo demanda. La batería, por cierto, es más grande que la de los sedanes compactos de la marca, llegando a 2.46 kWh.

Gracias a esta combinación la entrega de poder se siente muy bien, incluso llega a sentirse divertida cuando aceleras con pedal a fondo y notas cómo rápidamente escala el velocímetro, algo que sin duda alguna es más difícil de lograr con la versión solo a combustión. En definitiva, ninguna de las dos está pensada en el alto desempeño, aunque como menciono, es una grata sorpresa sentir esa respuesta.

Ya modulando la fuerza del pedal, es perfectamente dócil y fácil de llevar, además el recorrido que hay en el acelerador en el que se da la transición entre movimiento solo con electricidad y en modo híbrido es bastante holgado, por lo que se vuelve sencillo mantener el mayor tiempo posible el manejo en modo eléctrico.

Referente a la puesta a punto de suspensión, sí hubo un ligero ajuste en amortiguación para compensar el peso extra, aunque queda claro que se priorizó la comodidad como en el modelo a combustión total. La amortiguación es suave en cuanto a compresión y rebote, pero la sensación en cabina es algo brusca, especialmente porque las llantas que lleva son runflat, mismas que por su construcción son considerablemente más rígidas y no dispersan tan bien la energía de un impacto contra baches y otras imperfecciones en el camino. Por esa misma razón también es algo más notable el ruido del rodar de las llantas en la cabina. En cuanto a los resortes, mantienen una suavidad casi sin cambios, por lo que es notorio el balanceo de carrocería. Para una conducción tranquila en familia, me parece una solución realmente cómoda y amena en todo tipo de caminos.

 

Cuando hablamos de eficiencia es realmente donde Corolla Cross Hybrid tiene todo el sentido del mundo, pues nuestro mejor consumo estuvo en los 24.6 km/l, mientras que el peor rondó entre los 18 a 19.1 km/l. Normalmente nos mantuvimos entre 20.4 y 21.2 km/l, cosa que para este segmento es impresionante.

Una camioneta súper sensata y con un balance de precio excepcional

La Corolla Cross Hybrid tiene a un único rival directo y se trata de la KIA Niro, misma que se ve mucho mejor, se siente más refinada, tiene más equipo y asistencias avanzadas a la conducción. Sin embargo, su precio se eleva por más de 100,000 pesos sobre el de Corolla, que lo único que le reprocho en serio es la falta del monitor de punto ciego, fuera de ello realmente lo que le hace falta son cosas de imagen y confort, nada realmente necesario. 

 

Corolla Cross tampoco tiene el manejo tan agradable de un Mazda CX-30 o el infoentretenimiento de un Taos. Pero lo que si tiene es un tren motriz súper eficiente con el que prácticamente podrás circular el doble de tiempo sin parar en la gasolinera, tiene mucho espacio, una durabilidad característica de los Toyota y un precio que deja en el suelo a su rival más directo, por lo que reitero; no es el objeto de deseo en su grupo, no es el más pasional, pero sí que es el más racional y el que más sentido tiene comprar si lo que quieres es que cada uno de tus pesos valgan la pena. Súper recomendado.

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