Hace años en una de las revistas más interesantes de automovilismo, MotorSport, hicieron un recuento de las mejores cosas de la F1 y una de ellas era: Michael Schumacher en un auto no ganador.
Si viste Fórmula 1 durante los 90s seguramente vas a coincidir con ese veredicto, con el Kaiser desafiando y casi derrotando a todo aquel a su paso.
Uno de los aciertos del documental de Schumacher que se acaba de estrenar en Netflix es eso, reflejar la presión que tenía y su acenso que venía de dos campeonatos, pero quería lograr conquistar un desafío aún mayor.
Schumacher, el documental en general
Lo que vas a ver es casi dos horas con un repaso de la vida y carrera de Michael. Algunas cosas que me encantaron fueron las imágenes del cartódromo de Kerpen, de un Schumi niño hablando con la prensa, de su padre y su madre trabajando, en resumen, del ambiente donde se cocinó la entrada esta leyenda.
Hay aciertos en el documental, hablan Corinna (esposa), Ralf (hermano), Mick y Gina-María (hijos), Willi Weber (manager), Jean Todt y Ross Brawn, entre otros, y todos hablan en su idioma natal. También tenemos al Kaiser en su lengua.
Schumi: Debut y bi campeonato
De la efervescencia de su debut a los primeros años en Benetton creo que lo más interesante es la imagen donde Senna va a “explicarle” lo que tiene que hacer (después de un accidente) y ya pasamos a los títulos 94 y 95 con Hill explicando el accidente que definió el primero de los Campeonatos.
Si tengo que criticar algo, es que es más una novela, una Rapsodia Bohemia a la historia de Queen que un documental sobre la carrera deportiva del alemán, me faltaron las escenas de descalificación, el progreso en puntos de las temporadas, imágenes de pits, de reuniones de pilotos, etc.
Los años malditos de Ferrari
No lo voy a negar, era fanático de Schumacher y cuándo fue a Ferrari mi ánimo se puso rampante, piloto y escudería amados iban a ganar juntos… Sabía que en 1996 las cosas no iban a ser fáciles, pero en el 97 pensé mi sueño se cumplía… y después en el 98 y en el 99.
Imaginate, si yo la pasé mal (mi hermano era fanático del piloto que tuviera en frente, Hill, Villineuve, Hakkinen), ¿cómo lo debe de haber vivido Schumacher?
Me decepcionó que el documental no mostrar la última carrera de 1998 donde todo se desvaneció de golpe, también que no me mostraran como el Kaiser le pintaba la cara más de una vez a Villeneuve Jr. y a Hakkinen, o como aplazó su regreso tras el accidente de 1999. A cambio el documental me dio una recompensa, entender qué pasaba por la cabeza de Michael en esos años endemoniados.
Primero está Ross Brawn explicando la maniobra que definió el campeonato 97 y la manera en que Schumi lo vio todo hasta que vio la repetición en la TV.
Segundo, creo que hay declaraciones del finlandés volador que explican casi todo cuando se refiere a las actitudes límite de Schumacher y como llevaba todo a un punto extremo.
Finalmente está el accidente con Coulthard y la anécdota de la charla con el piloto de McLaren que termina de resumirte la actitud Schumacher que lo llevaba a pasarse de la raya en su afán de ganar.
Schumacher: explosión de alegría, retiro y actualidad
El documental sabe cargarte muy bien del ambiente de la época para desembocar en la explosión de alegría de 2000 en adelante.
La narración suma imágenes de Schumacher fuera de las pistas, ya sea con la familia como con colegas, aunque de nuevo, a mí, fanático de la F1 me faltaron escenas como las del documental de Senna, con el equipo, en las reuniones de pilotos, algo más tuerca.
Finalmente hay un buen decálogo del Michael retirado, hombre de familia y amante de los deportes extremos.
El documental termina con declaraciones de su mujer e hijos sobre su estado actual, emotivas, pero de verdad me confunden: está, pero no está parecen decir y no se que pensar, si mi ídolo de la juventud está postrado pero consciente o si es solo un cuerpo en una cama, siento que en ese punto juegan con la sensiblería pero no me suman nada.
En resumen y como siempre digo, gustos hay tantos como personas y lo que a mi me gustó puede no interesarte o viceversa. En todo caso, mira el documental y cuenta que te pareció, como siempre te pido, sin agredir y con argumentos.
