En el primer semestre de este 2021, las ventas de autos nuevos llegaron a 515 mil unidades vendidas, una buena recuperación sobre el año pasado, cuando los números fueron 436 mil vehículos. Es buena noticia, pero nada del otro mundo, simplemente representa un rebote positivo sobre el desastroso primer semestre de 2020. Lo que sí me llama la atención es que cerca de un tercio de estas ventas sean SUV, entre compactas y subcompactas, sin contar las premium, cuando hace tan solo ocho años las ventas de todas las SUV, incluyendo minivanes, representaban menos de 20% de las ventas totales de vehículos nuevos en México. Todo mundo quiere una camioneta, nos queda claro. Con la oferta cada vez mayor de SUV, cuáles son realmente sus favoritas, cuáles las que más se venden y entre ellas cuáles merecen el honor de estar en la cima de esa montaña.
Hace tan solo 10 años si preguntáramos al público y analizáramos las cifras de mercado, la respuesta sobre cuál era la verdadera consentida de México era muy simple: la Honda CR-V. Era natural que así fuera. El producto es bueno, amplio, de precio razonable (en aquél entonces al menos), durable, fiable, con buen servicio en las agencias y la mejor reventa en su categoría. El mexicano que en los años 2000 tuvo un Jetta en la cabeza, en los años 2010 puso una CR-V en su lugar. Pero hoy, lo que realmente está en la mente del mexicano es tener una camioneta. Las SUV se volvieron símbolo de estatus, la forma de impresionar a vecinos, familiares y colegas de trabajo. Y entre ellas las dos categorías básicas - al menos por ahora- son las compactas y las subcompactas, con sus respectivas favoritas del público.
¿Lo más vendido es lo mejor?
Según las cifras del INEGI, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía, entre las SUV subcompactas la reina es la Kia Seltos, que vendió 7,148 unidades en los primeros seis meses del año. La Kia está por arriba de la Nissan Kicks, que comercializó 6,352 unidades y de la Honda HR-V, que vendió 6,020 unidades en el periodo. Seltos, de hecho, es la SUV que más se vendió en México, entre todas las categorías. Sin embargo, pese a que ninguna es mal producto, no las pondría como top 3 en el segmento. Por desempeño, economía y valor/precio creo que Suzuki Vitara está arriba. Si espacio interior fuera mi necesidad, VW T-Cross es una mejor respuesta a esa necesidad al igual que en consumo. Y si bien Seltos en sus versiones con motor 1.6 ofrece 11 HP más que la VW, en la práctica su desempeño es similar, pero con mayor consumo. Si espacio no importa pero manejo sí, la Mazda CX-3 me parece mejor opción. Y si hablamos de Seltos turbo, por precio ya mejor brincar hacia Mazda CX-30, con 188 HP. Kicks mejoró mucho en el modelo 21, ya con 6 bolsas y ESP en todas sus versiones, lo que hace que sea la más lógica entre esas, al contrario de la HR-V, que solo ofrece 6 bolsas en la versión Touring, cuyo precio de cerca de 470 mil pesos, ya hace más lógico comprar una VW Taos, que llegó con tal fuerza que incluso ya rebasó en ventas a CR-V, logrando 7,097 unidades vendidas vs 7,022 de la Honda CR-V.
Claro, la Honda pertenece a un segmento superior y comparada a su rival directa de VW, la Tiguan, gana por buen margen ya que ya alemana vendió menos que la mitad de lo que logró la japonesa (7,022 vs 3,443). Pese a seguir siendo el mismo buen producto de siempre, la CR-V no me parece mejor que el segundo lugar: la Toyota Rav-4, que vendió 6,201 unidades. Rav-4 es más potente, equipada, tiene mejor plataforma y cuenta con la opción de tracción integral.
El tercer lugar en la categoría es la Mazda CX-5 (5,035 unidades) que tiene menos espacio interior, pero mejores acabados y mejor manejo, especialmente en la versión turbo y aunque en acabados nadie le gana a la Peugeot 3008, sus ventas de solo 720 vehículos no son una amenaza.
En resumidas cuentas, no siempre lo más vendido es lo mejor, pero casi siempre es lo más robado, con algunas excepciones como la Sportage, que vendió 4,082 unidades y en 2020 fue la número uno en robo con violencia.