TAG Heuer nació en Saint-Imier, Suiza, en 1860. En los siguientes 160 años, la compañía se ha transformado y evolucionado varias veces: desde relojes de bolsillo hasta instrumentos de tablero y relojes de pulsera. En su historia viva más reciente, TAG Heuer se ha definido principalmente por un modelo: el Carrera.
Por lo tanto, tiene sentido que para celebrar sus primeros 160 años, TAG Heuer lo haga con una edición limitada de este modelo, el TAG Heuer Carrera 160 Years Silver Limited Edition. Este reloj es una pura recreación histórica, pero al mismo tiempo no lo es, ya que debajo de esa fachada purista late una bestia mucho más moderna.
El Carrera, para aquellos de ustedes que necesitan un resumen, fue soñado en 1962 por Jack Heuer, quien nombró su nuevo cronógrafo en honor a la peligrosa Carrera Panamericana. Carrera es un nombre que evoca romance, peligro y aventura, por lo que no es una gran sorpresa que haya permanecido. El diseño de este reloj se remonta a los primeros días (y referencias) del Carrera, un modelo de 1964 con un dial plateado monocromático conocido como ‘2447S’. Es un tratamiento sorprendentemente elegante para un reloj que se convertiría en uno de los mejores cronómetros deportivos de todos los tiempos, pero, al observar esta recreación moderna, no se puede negar el encanto y el carisma puros que este reloj irradia.
Un modelo de 1964 con dial plateado monocromático conocido como '2447S'.
La caja es de 39 mm de acero pulido, más gruesa que la original, por lo demás es un tributo apropiado. Los pulsadores, el bisel abovedado y esas líneas clásicas en las asas Carrera son evidentes.
El acabado rayo de sol plateado es radiante, los registros empotrados están bien hechos, y las manecillas facetadas y los marcadores de hora con delicados gráficos Super-LumiNova beige son perfectos, al igual que el texto de marcado mínimo y de período correcto.
Pero es en la parte de atrás donde está presente el cambio más significativo. Atrás quedó el movimiento basado en Valjoux, ahora es reemplazado por el nuevo movimiento de gran potencia de TAG Heuer, el Heuer 02. Y aunque agrega algunos milímetros al perfil, la recompensa vale la pena.
La construcción moderna de rueda de columna, una frecuencia de latido de 4Hz y 80 horas de reserva de marcha aceleran esta pieza de diseño de los años 60 al siglo XXI.
