Indiscutiblemente, Noruega es el país que más empeño ha puesto para reducir las emisiones contaminantes por lo que ha impuesto una serie de medidas en los últimos años.
Uno de los últimos planes de esta estrategia ecológica por parte del gobierno noruego es que para 2025 todos los vehículos que se comercialicen en su territorio deberán ser de energías alternativas. Esto quiere decir que sólo serán vendidos automóviles eléctricos de batería o de pila de combustible, o bien híbridos plug-in (enchufable), por lo que los autos que utilicen solamente diesel o gasolina ya no se verán en los showrooms.
Al igual que las demás estrategias relacionadas con la movilidad verde, los ciudadanos recibirán apoyo del gobierno recibiendo una serie de incentivos para lograr este objetivo. Actualmente, las ventas de autos eléctricos han alcanzado el 37 por ciento.
Dentro de los estímulos que otorga el gobierno noruego por los vehículos “verdes” está la exención de impuestos, así como no pagar los peajes y estacionamientos en el centro de la ciudad.
A finales de 2016 cerca de 100,000 vehículos 100 por ciento eléctricos circularon en las carreteras noruegas, por lo que se espera que para 2020 la cifra aumente a 250,000 unidades.