Antecedentes
Mazda llegó a México en 2005, es decir está cumpliendo su primera década y que mejor manera de celebrarlo que con la introducción de su producto más reciente, el Mazda2 2016.
El Mazda2 o Demio como se le conoce en Japón es un subcompacto que debutó 1996 y que se encuentra ya en su cuarta generación.
El primer Mazda2 que conocimos en nuestro país fue el de tercera generación y que debutó en 2007, es importante destacar que ese vehículo todavía fue desarrollado conjuntamente con Ford, de hecho compartía plataforma con el Fiesta actual. Sin embargo en un inicio la marca se mostró renuente a traerlo y no fue sino hasta el 2011 ya como año modelo 2012 que se empezó a vender aprovechando un facelift (ver prueba aquí).
El Mazda2 2016 se fabrica en nuestro país al igual que su hermano mayor el Mazda3 en la planta de la marca en Salamanca, Guanajuato y al igual que el resto de la gama, se beneficia del lenguaje de diseño denominado por la marca como Kodo que ha recibido excelente aceptación por parte del público.
Mecánicamente, también adopta la familia de tecnologías SKYACTIV que buscan mejorar la eficiencia de todo el vehículo ya sea disminuyendo el peso del chasis, reduciendo la fricción de la transmisión o incrementando la compresión del motor.
Con este nuevo Mazda2 2016 el fabricante nipón apunta a convertirse en la nueva referencia de un segmento de gente joven gracias a sus atributos en aspectos clave para este tipo de cliente como: diseño, tecnología y moda: Se trata de un apetecible segmento más lúdico, dominado por exponentes como: SEAT Ibiza, Suzuki Swift, Ford Fiesta, Peugeot 208, Volkswagen Polo y Honda Fit, entre otros.
Precio: $240,900 pesos
Mecánica
Bajo el cofre encontramos un nuevo bloque SKYACTIV-G de 1.5 litros que entrega 106 hp y 103 libras-pie de torque y una relación de compresión de 12:1, que se acopla a transmisiones manual de seis velocidades o automática, también de seis velocidades con modo manual que dicho sea de paso fue la que equipaba nuestra unidad de pruebas.
Por lo que hace a equipamiento de seguridad encontramos ABS y bolsas de aire frontales para todas las versiones, control de estabilidad y control de tracción. Aunque es suficiente, no le vendrían mal bolsas laterales y de cortina también.
Confort
Ya en el interior, nos encontramos sin duda con el mejor habitáculo del segmento –y por mucho-, la calidad de materiales (muchos de ellos soft touch) y ensamble, así como un diseño, combinación de colores y texturas sumamente atractivas hacen que el interior del Mazda2 se perciba verdaderamente impresionante, el mismo efecto de superioridad que generó el Audi A1 cuando se lanzó con respecto de cualquier otro subcompacto.
Pero no solo se trata de la importantísima cuestión sensorial, sino también de una gran cantidad de equipamiento de conveniencia que resulta atípica en el segmento. Empezando por la pantalla táctil de 7” que se ubica en la parte superior del tablero y que alberga el sistema de info – entretenimiento Mazda Connect mediante el cual podemos controlar: sistema de audio y teléfono móvil vía la interfaz Blueooth. Dicho sistema es bastante intuitivo gracias a la presencia de un mando muy al estilo iDrive de BMW ubicado en la consola central.
Pero eso es solo el principio, el Mazda2 2016 cuenta además con mandos en el volante para el sistema de audio y control de velocidad crucero, cuenta con aire acondicionado automático de dos zonas, asientos con calefacción e incluso Head Up Display que funciona idéntico a su hermano mayor, el Mazda3 y también a la más reciente iteración del MINI Cooper.
Al haber crecido en todas sus cotas, este nuevo subcompacto ofrece más espacio para los ocupantes, algo que agradecerán sobre todo los de la banca posterior, aun así sigue siendo un vehículo apto para 4 ocupantes con buen nivel de comodidad.
La calidad de marcha es buena, aunque ciertamente, el Mazda2 podría filtrar mejor los ruidos tanto de rodamiento como los producidos en el exterior.
Manejo
Tras el volante, el más pequeño de la gama del fabricante de Hiroshima no decepciona y presume de los mismos atributos de manejo que tan buenos dividendos le han dado al resto de la gama. Aunque es pequeño y no es precisamente muy rápido, el Mazda2 es comunicativo y noble, de esos autos que se disfrutan en caminos sinuosos y siempre son capaces de sacarnos una sonrisa.
El binomio motor – transmisión funciona de manera impecable, los cambios se efectúan de forma suave y pese a ser un motor relativamente pequeño y al hecho de no contar con la asistencia de un turbocargador, la entrega de torque en baja rotación es bastante aceptable. Gracias a que cuenta con dos modos de manejo, se puede privilegiar el rendimiento de combustible en el modo por Default, a al activar el botón Sport que se encuentra en la periferia de la palanca de cambios, la respuesta del acelerador, régimen de giro al que se efectúan los cambios y rigidez de la dirección se modifican para sacar a relucir el lado divertido del Mazda2.
Con el modo Sport activado, el pequeño 1.5 litros SKYACTIV puede subir bien pasadas las seis mil vueltas sin ningún esfuerzo y es casi en la frontera de las 5 mil que pareciera que encontró una veintena de caballos que estaban bien escondidos. Con el tacómetro cerca de la zona roja, el Mazda2 se torna ágil, divertido y con bastante brío, una grata revelación a decir verdad. Claro está que lo anterior impacta dramáticamente en las cifras de rendimiento, pero bueno, habrá una que otra ocasión en la que no importe gastar un poco más de combustible si a cambio podemos divertirnos así.
En materia de rendimiento de combustible, la marca promete hasta 18 km/l, aunque durante el tiempo de prueba nuestro mejor resultado fue de 16 km/l siendo obsesivamente cuidadosos con el pedal de acelerador. Aunque utilizando el aire acondicionado y revolucionando un poco más el motor el consumo bajó a 14 km/l.
En carretera las cosas fueron distintas, a un régimen de giro entre 2 a 3 mil vueltas y velocidades promedio entre 120 y 130 km/h logramos una cifra de consumo de 5.6 litros cada 100 kilómetros, que traducido a rendimiento en km/l nos da una extraordinaria cifra de 17.86 km/l, un rendimiento sobresaliente.
Conclusión
No cabe duda, el nuevo Mazda2 2016 se coloca como el rival a vencer en el segmento de los subcompactos hatchback, cuenta con un interior espectacular visualmente y con niveles de acabados infinitamente superiores a sus competidores directos, más en línea con lo que Audi entrega con el A1.
También en cuanto a equipamiento de confort pone el listón muy alto gracias al mando central, head up display y pantalla táctil.
Por si fuera poco ofrece un balance muy bueno entre desempeño y rendimiento y en este apartado el único competidor que es capaz de poner buena pelea es el Ibiza FR gracias a su extraordinario 1.2 TSI acoplado a la transmisión DSG, incluso gracias al turbo podríamos decir que el SEAT lleva ventaja, pero no resulta suficiente para contrarrestar todos los demás apartados en los que el Mazda2 le lleva ventaja.
Mazda ha apostado por diseño y tecnología, claramente la estrategia está resultando, el Mazda2 no es la excepción y al igual que Mazda3 o CX-5, apunta a desenvolverse en la parte alta de su segmento, claro está entregando a cambio una mejor experiencia, casi premium.
Mazda2 2016 a prueba