
El alma de Porsche se siente desde adentro, y el nuevo Cayenne Electric, que debutará a finales de este año lo demuestra.
El protagonista al interior es el Flow Display, la pantalla curva más grande jamás instalada en un Porsche, que se integra con elegancia en el tablero y ofrece una experiencia de uso intuitiva. Forma parte del nuevo concepto Porsche Digital Interaction, que convierte el habitáculo en un espacio inmersivo donde tecnología y diseño trabajan como uno solo.
Los asientos traseros son eléctricos de serie y permiten variar entre una posición relajada o maximizar la capacidad de carga. A esto se suman los Mood Modes, que ajustan luz, clima, sonido y asientos para crear ambientes enfocados en la relajación, la concentración o el manejo deportivo. El techo panorámico con Variable Light Control es el más grande instalado en un Porsche y permite elegir entre distintos niveles de opacidad. Incluso el sistema de calefacción ahora calienta superficies como descansabrazos y paneles, logrando una atmósfera más acogedora y eficiente.
En cuanto a personalización, este SUV eléctrico abre un universo de opciones con 13 combinaciones de color, cuatro paquetes interiores y cinco de acentos, además de nuevos tonos como Magnesium Grey, Lavender y Sage Grey. Los clientes que busquen un look distinto pueden optar por el interior Race-Tex con estampado Pepita, un guiño a la historia de la marca. Y si eso no basta, programas como Sonderwunsch permiten llevar la individualidad a niveles de pieza única.
La digitalización va más allá de lo estético. El clúster digital de 14.25 pulgadas ofrece información clara y configurable, mientras que el display para el pasajero permite ver videos o controlar apps sin distraer al conductor. Un head-up display con realidad aumentada proyecta información directamente en el campo de visión, y la nueva Themes App ajusta esquemas de color en todas las pantallas para que el diseño digital también sea parte del estilo.
Finalmente, el asistente de voz con IA entiende instrucciones complejas y controla funciones de confort, navegación o entretenimiento de manera natural. Y con la Porsche Digital Key, el smartphone o smartwatch se convierte en la llave del Cayenne Electric.