La temporada 2013 marcó cambios muy importantes para Lewis Hamilton, el primero su llegada al equipo Mercedes-Benz, tras haber pertenecido desde los 12 años a la estructura de McLaren, el segundo, la aparición de un bulldog cachorrito que se ganó al instante a todo el paddock de la Fórmula 1, Roscoe Hamilton.
Tristemente la vida de esos seres mágicos pasa muy rápido y este lunes el siete veces Campeón Mundial anunció el fallecimiento de su “mejor amigo” a los 12 años.
“Anoche perdí a mi mejor amigo. Muchas gracias por todo el amor que le mostraron durante estos años. Roscoe, para siempre”, publicó Hamilton en sus cuentas oficiales en redes sociales.
El viernes pasado el británico publicó en sus redes, que Roscoe había sido internado de urgencia por complicaciones respiratorias, que tras algunos exámenes se determinó que era neumonía. Desafortunadamente el cuadro se complicó y se le detuvo el corazón, pudiendo ser reanimado por los veterinarios, sin embargo, quedó en coma y tuvo que ser entubado tras ello.
Al parecer, Hamilton tuvo que tomar la decisión de desconectar a su perro y dejarlo ir.
“Después de cuatro días en cuidados intensivos, luchando con cada pizca de fuerza que tenía, tuve que tomar la decisión más difícil de mi vida y decir adiós a Roscoe”.
Tras este anuncio toda la comunidad de la Fórmula 1 se ha volcado en mensajes de apoyo a Hamilton y han publicado muchos de los momentos que dejó Roscoe en el paddock de los Grandes Premios.
Este fin de semana Lewis Hamilton tenía programado participar en unas sesiones de test de neumáticos con Ferrari y Pirelli, de los que se ausentó (siendo reemplazado por el piloto reserva, Zhou Guanyu), para permanecer al lado de su compañero más fiel en los últimos años.
“Aunque fue muy duro, tenerlo fue una de las partes más hermosas de la vida: amarlo tan profundamente y ser amado a cambio. Graciasa todos por el amor y el apoyo que le han brindado a Roscoe a lo largo de los años. Ha sido muy especial presenciarlo y sentirlo.
“Falleció la noche del domingo 28 de septiembre en mis brazos.”
