
Los autos pequeños y accesibles están desapareciendo de gran parte de los mercados automotrices por diferentes razones, pero al menos desde la perspectiva de la industria automotriz europea, su desaparición tiene más que ver con las estrictas regulaciones que con el interés de los clientes. Por ello mismo, varios ejecutivos están buscando cambiar las regulaciones para darles mayor oportunidad de crear productos más accesibles.
El llamado hacia la Unión Europea llegó directamente del CEO de Stellantis, John Elkann y unos días antes de su renuncia, por parte de Luca de Meo, ex-CEO de Renault. Quienes propusieron adoptar regulaciones similares a las de Japón para tener autos urbanos pequeños cómo los famosos kei cars, aunque ellos los llamarían E-Cars, pues además de todo, serían eléctricos.
Elkann argumentó que en Europa se llegaron a vender hasta un millón de autos con un precio inferior a los 15,000 euros en un solo año. Mientras que en los años recientes, tal cifra se ha desplomado hasta las 100,000 unidades al año, básicamente un desplome del 90%.
Esta baja la atribuyen a las regulaciones que cada vez les hacen gastar más dinero y tiempo en desarrollar autos, por lo que los más pequeños y accesibles obtienen menores margenes de ganancia o bien terminan perdiendo dinero en ellos. Elkann también citó que están por enfrentarse a más de 120 nuevas leyes para 2030, e incluso tienen que enfocar hasta el 25% del trabajo de sus ingenieros al área de regulaciones.
Finalmente citó que en Japón el segmento de los kei cars representa hasta el 40% de las ventas de toda la industria japonesa, por lo que ellos podrían imitar su estilo de desarrollo y no solo ver mejores márgenes para ellos cómo empresas, también podrían ofrecer productos más accesibles para más clientes.