El Sterrato es uno de esos modelos con los que el Lamborghini Huracan comenzó a despedirse, además, fue es el primer auto que la casa del toro creó con un espíritu más aventurero; es robusto, impresionante, ligero y aun huele a gasolina. Su silueta impresionante dejaría poco margen a la personalización, pero Mansory lo hace de nuevo.
No es fácil meterle mano a un auto de edición especial que de alguna manera ya nació “modificado”, en este caso para la tierra, pero el tuner no conoce límites y desarrolló un proyecto sencillo pero con mucho potencial que incluye un nuvo kit de carrocería en fibra de carbono, rines, y un impecable trabajo en el habitáculo.
Las piezas exteriores están fabricadas en fibra de carbono forjado y algunas sustituyen a las originales. Además, la pintura de la carrocería le aportan un estilo realmente “malvado” al Sterrato de Mansory:
- Extensiones para salpicaderas
- Nuevo cofre
- Tapa trasera del motor rediseñada
- Nuevo alerón posterior más grande, estilo Lambo Tecnica y STO
Los espejos, techo, accesorios de fascia y protectores inferiores también tienen aplicación de carbono, mientras que un nuevo juego de rines forjados en 19” emparejan los espacios ganados.
El diseño exterior es impresionante, pero el habitáculo es una obra de arte. Lambo hizo un gran trabajo y fue la base perfecta para que Mansory lo enalteciera:
- Alcantara verde en asientos, volante y consola central
- Costuras rojas contrastan dicho material
- Los asientos conservan la franja central y el nombre de Sterrato ahora en rojo
- Tapetes ribeteados en rojo
- Aplicaciones de carbono en el volante con mirilla roja y salidas de aire
- Algunos botones también recibieron color verde
- El botón de encendido se colocó en el techo, al estilo del McLaren Senna
El poderoso V10 de 5.2 litros ya venía con 602 Hp de fábrica. Suficientes para lograr el 0 a 100 en solo 3.3 segundos y alcanzar los 260 km/h de velocidad máxima
Mansory aun no da precio de este impresionante paquete, pero la placa colocada en la consola central advierte que será bastante caro y limitado a las ya de por sí limitadas 1,499 unidades que Lamborghini produjo del Sterrato.