Volga, es un histórico fabricante ruso especializado en la construcción de autos ejecutivos que estuvo en operaciones entre 1956 a 2010. De hecho, su último vehículo denominado Siber, se basaba directamente en el Chrysler Cirrus de segunda generación.
Pues, bien, tras muchos años, de no saber nada de esta marca que le pertenece a GAZ, se confirmó que, a partir del 21 de mayo, Volga resurge de entre los muertos, con tres modelos que se basan directamente en productos del fabricante chino Changan.
El primero de estos productos recibe el nombre de C40 y se trata de un sedán mediano que se basa en el Changan Raeton Plus de segunda generación. Mide 4,800 mm de largo y cuenta con una distancia entre ejes de 2,770 mm.
El segundo recibe el nombre de K30 y se trata de una SUV conpacta basada en la Changan Oshan X5 que debutó en 2020. Por último, está la K40 es una SUV de tamaño mediano basada en la Changan UNI-Z que salió a la venta en 2022.
En relación con los modelos donantes, las camionetas de Volga solo se distinguen por una nueva fascia, parrilla y logotipos GAZ. Curiosamente, los tres utilizan el mismo motor Changan JL473ZQ7 de 1.5 litros que desarrolla 188 caballos de fuerza.
Cabe recordar que tras la invación de Rusia a Ucrania, muchos fabricantes occidentales dejaron de vender sus autos. Dejándole el camino libre a las marcas chinas que se han adueñado de aquel mercado.