No voy a ahondar en detalles estadísticos acerca de las SUVs, a estas a alturas todo mundo sabemos lo que sucede con ellas en la industria mundial y, honestamente, cuando tenemos a disposición una Alfa Romeo Stelvio QV, ¿a quién le importa cuantas personas quepan atrás o cuanto espacio tenga en el maletero?
No señora, señor, esta "camioneta", y lo digo entre comillas porque en Italia se les ocurrió ponerle una silueta de SUV a la arquitectura de un coupé deportivo; se trata de sensaciones, de emoción, de entusiasmo al volante, de manejo puro y de disfrutar cada trayecto a bordo de ella; te cuento por qué.
Alfa Romeo Stelvio QV: Bellissimo atleta
De primera instancia, esta guapa italiana atrapa nuestras miradas mediante una compacta y curvilínea carrocería que no niega sus orígenes. Recordemos que a Alfa Romeo lo conocemos por sus diseños aventurados, italianos al fin. Sin embargo, agradecemos que la cosa haya mejorado en los últimos años y que en Stelvio QV se pongan de manifiesto, entendiendo que la tradición del diseño y la función que requiere del desempeño también pueden trabajar juntos.
Encontramos fascias aerondinámicamente mejor logradas pero bien balanceadas en cuanto diseño y acorde al lenguaje que presenta Alfa Romeo. En ese tenor, destaco el cofre especial para la versión, fabricado en aluminio, con entradas de aire funcionales para que Stelvio QV respire a libre demanda. De ahí en más, los componentes estéticos se hacen presentes para cumplir su función haciendo que, en general esta SUV luzca como mejor puedas describirla.
- Faros bi-xenon adaptativos con luz diurna LED.
- Flappers posteriores en salpicaderas.
- Difusor posterior con 4 salidas de escape.
- Rines de 21" progresivos (21x9 frontales y 21x10 traseros).
- Quemacoco panorámico.
Alfa Romeo Stelvio QV: Cuatro máximo, si son dos, mejor.
Si algo hay que destacar en el habitáculo de la Stelvio QV es "la pimienta", ¿a qué me refiero? A esas ganas de ser diferente y propositiva en detalles que si bien tiene un costo extra como los asientos Sparco, presenta acabados con un toque deportivo real, tan real como la fibra de carbono, la tapicería del volante que, por cierto, no sólo es visualmente bien afortunado, sino que también es el principal transmisor del entusiasmo y actitud velocista de Stelvio QV, ya que además de las funciones acostumbradas, incorpora el botón de encendido en un contrastante color rojo. Las paletas de cambios son prominentes y de sólido aluminio auténtico, ancladas a la columna de dirección, detalle que, si me preguntas, es el mejor lugar para ponerlas pues en pleno frenesí de curvas y volanteos, siempre estarán ahí para decirle a la transmisión qué hacer.
La tradición italiana de Alfa Romeo entendió o que era necesario ser más flexible y funcional, por lo que el habitáculo de esta SUV se nota mejor distribuido, y sin pretender ser la cabina de un avión caza, logra acomodar los componentes en el lugar ideal. Su cluster de 7" o la unidad de 8.8" touchscreen con mucha conectividad disponible no son nada apabuyantes ni te saturan de información al conducir. En cambio, haciendo uso de los diversos menús podemos tener acceso a un completo paquete de telemetría que nos informa sobre la presión del turbo, aceite, temperatura, etc, todo en tiempo real. Podría decir que no impresiona, pero funciona y, para divertirme prefiero la segunda.
Lo que pudo no haber tenido, lo que no importa y lo ideal
El quemacocos panorámico es monumental y si bien cumple para quienes gustan del sol -o no, con una excelente cortinilla-, había que tenerlo pues porque SUV... pero podría no tenerlo y sin problemas. Ahora bien, en el tema del tan buscado espacio de las plazas traseras hay que decirlo: no existe y la verdad, no está tan mal porque van a pasar dos cosas.
La primera es que tus pequeños no requieran tanto espacio en las piernas, sus sillitas anclarán perfectamente en los ISO FIX, aunque ponerlas signifique casi una clase de yoga para ti; y serás la mamá/papá "fashion" del colegio.
La segunda y más importante, es que Stelvio QV no está hecho para invitar a tus amigas(os) ni mucho menos a tus suegros. Alguien por arriba del 1.70 m de estatura comenzará a sufrir y pues qué aburrido que alguien se vaya quejando cuando tú y tu acompañante se divierten en las curvas de la carretera. Así las cosas, en ese sentido, esta italiana es algo egoísta.
Finalmente tenemos el espacio del maletero que, es bueno pero pudo ser mejor. Y es que en el vano motor, el V6 no dejó espacio para la batería, por lo que esta tuvo que ser acomodada en el piso de la cajuela. La repercusión es lógica pero no aceptable o ideal. Podemos llevar sin problema el súper del mes, un par de maletas y/o una carriola, incluso a la mascota, sobre todos si abatimos los respaldos posteriores (con un actuador muy conveniente), pero si viajamos, ¿dónde ponemos la llanta de refacción provista a petición? No estoy seguro de que lo anterior sea un punto a mejorar o parte del egoísmo de Stelvio QV.
Alfa Romeo Stelvio QV: Seductora, radical y adictiva
Tal como lo anticipaba, Alfa Romeo Stelvio QV (Quadrifoglio para los cuates) es una máquina hecha para sonreír, para enamorarte, disfrutar y andar muy rápido. Los "negocios" con Ferrari rinden frutos y se reflejan en la dinámica de esta SUV que emplea un motor V6 bi-turbo construido en aluminio y con una disposición de cilindros a 90°. Pero por ahora no voy a saturarte de datos técnicos porque Stelvio QV es más que eso, es más que una SUV y es más que un transporte cotidiano.
La vida pasa muy rápido en este Quadrifoglio que aprovecha cada instante para sorprender o arrancarte una sonrrisa. Desde que lo enciendes ya te pone de buenas con un sistema de escape que se entona de acuerdo al modo de manejo que seleccionemos en el D.N.A Pro 2.0. Lo mismo sucede con la postura de la suspensión adaptativa pero, te soy honesto, la vas a amar u odiar cuando transites por una ciudad como CDMX donde todo, absolutamente todo lo que haya en el asfalto repercuta en el limitado confort de su marcha. Ni modo, es un vehículo deportivo, y hay que pagar el costo, aún en la configuración más "blanda" de la suspensión.
Es hasta que comienzas a circular por vías rápidas cuando entiendes y perdonas los malos tratos de la dureza y solidez estructural de Stelvio. Ni qué decir del paso por carreteras o caminos sinuosos, la mejor oportunidad de descubrir los alcances y la gran retroalimentación que hay entre motor y caja (con eje de transmisión de fibra de carbono), o entre dirección y una tracción integral que electrónicamente distribuye torque para otorgar sensaciones de una tracción trasera, con una marcha divertida, muy dinámica, segura y siempre con ganas de ir cada vez por más.
Si bien toda esa sensación de seguridad tras el volante se respalda por un numeroso sistema de asistencias, en Stelvio QV prevalece lo bien que están trabajados tanto arquitectura como bastidor, el cual goza de un muy sano porcentaje en la distribución de peso (51/49, delantero y trasero, respectivamente). La disposición que tiene para resolver reacciones, acomodos o curvas cerradas sorprende con límites ideales de velocidad en los que cualquier SUV "normal" comenzaría a comprometer la seguridad. Y es que sí, esta italiana para eso fue creada (las otras no), pero el subconsciente puede tardar más tiempo en asimiliarlo que el que esta SUV requiere para reacomodarse tras algún subviraje, luego, los frenos Brembo serán impecables, así de noble y divertida es.
Casi tiene la precisión de las alemanas (Porsche Macan, BMW X5 o Mercedes-Benz GLE de su segmento) pero además, le pone sabor propio con esa dosis informal y atrevida de los deportivos italianos que saben llegar al corazón del entusiasta mediante un manejo más puro, divertido, donde no importa que se tengan 200 o 505 Hp como el Stelvio QV, porque tanto la composición como la actitud general del auto contribuirán a que cada kilómetro recorrido sea un goce absoluto, sobre todo cuando no sabes que suena mejor, si el V6 biturbo, o las roncas notas del escape con cuatro salidas que, por cierto, lucen un acabado cromo oscuro.
Ya sea por velocidad o porque lo bueno termina muy rápido, el tiempo se va volando en esta Alfa Romeo Stelvio QV y eso incluye los traslados al cine, dejar a los niños en el kinder o alguna salida de fin de semana. Lo que quieras lo puede hacer porque es una SUV, pero deberás tener cuidado con sus límites naturales como el deportivo que es y como los que te he contado. A parte de eso, cuando tu esposa pregunte qué camioneta van a comprar, hazle caso a tu corazón y dile Alfa Romeo Stelvio QV. Quizás una salida el fin de semana a bordo de esta divertidísima y pasional SUV le desdibuje la cara de enojo.
Alfa Romeo Stelvio QV: Precio
$ 2,070,000 pesos
- Motor: V6 bi-turbo de aluminio.
- Cilindrada: 2.9 litros.
- Potencia: 505 Hp
- Torque: 443 Lb-pie
- Transmisión: Automática de 8 vels.
- Dirección electroasistida
- Tracción Q4.
- Suspensión adaptativa.
- Selector de modos de manejo Alfa D.N.A. Pro 2.0: Dynamic, Natural, Advance Efficiency & Race.
- 0-100 km/h: 3.6 segundos.
- Velocidad Máxima: 283 km/h
- 8 bolsas de aire.
- Asistencias: de colisión frontal, desvío de carril, arranque en pendiente (HSA), descenso de pendiente (HDC), control de diferencial con vectorización de torque.