Si algo reconoceremos eternamente de Lamborghini, son los diseños y la manera de aplicar tecnología a ellos. Materiales, texturas, formas, todo en un “Lambo” se trata de potencia y diseño, pero no podríamos entender mucho de este tema sin mencionar un modelo que, hasta hoy, es fuente de inspiración en Italia y todo el mundo.
¿Qué pasa?
En 1970, Lamborghini presentó al mundo uno de los autos más bonitos jamás creados, y si bien antes que él ya había varios modelos que destacaban en diseño, circulando por el mundo, este italiano se encargó de darles una bofetada con guante blanco. Hablamos del Lamborghini Countach, un auto que desde el momento en que vio la luz, cambió la manera de interpretar el lenguaje de diseño en los autos, creando tendencia en toda la industria.
Aquella ligera carrocería fabricada en aluminio y fibra de vidrio, era solo la “cara bonita” de un poderoso motor V12 que se volvió un objeto de culto para muchos coleccionistas. El Lamborghini Countach, simplemente se adelantó a su tiempo y es contemporáneo de sucesos históricos que dieron lugar a tecnologías que mejoraron la vida de las personas, como la aguerrida carrera espacial entre rusos y americanos, la llegada de las computadoras o el “boom” de la aeronáutica.
Laborghini Countach: El origen de las formas del toro
Mientras todo eso sucedía, en Italia se gestaba el surgimiento de las más glamurosas tendencias de la moda, los colores llamativos y la apertura de una sociedad que había sido muy golpeada durante y después de la segunda guerra mundial. Todos estos acontecimientos alimentaron la mente creativa del diseñador Marcello Gandini, para crear las líneas de lo que se convirtió en el Lamborghini Countach. El mismo Mitja Borkert, Jefe de Diseño de Lamborghini lo describe así: “Su diseño se compone de proporciones perfectas, caracterizado por un enfoque muy puro y esencial. Desde el punto de vista estilístico, es una inspiración perfecta porque es un elemento de continuidad visual entre pasado y presente. Es el epítome del ADN en todo el diseño de Lamborghini, la tradición del lenguaje estilístico desde los orígenes hasta la actualidad ".
El Lamborghini Countach, es el origen de las clásicas formas de la marca, el sello distintivo del toro surgió con él: la carrocería baja y ancha, las caderas pronunciadas, las líneas sólidas y radicales que recorren los costados. Ni qué decir de la posición de los cristales o la distribución del habitáculo; sin lugar a dudas, quien haya visto o manejado un Countach, es realmente afortunado.
Todo ese conjunto de formas y trazos, ha sido la inspiración y el modelo a seguir por los Lamborghinis más actuales como el Aventador, el Huracán, Sián o el Urus, por ejemplo. El Lambrghini Countach rompió esquemas y sigue cautivando incluso en una época en la que el diseño se apoya imprescindiblemente en la tecnología. Es por ello que, a 50 años de su aparición, este modelo deba ser celebrado no solo por sus creadores, sino por toda la industria automotriz, pues como afirma Borkert: “Hay obras de arte que siempre siguen siendo relevante, y la formas del Countach es una de ellas”.
Incluso en épocas en las que el futuro de la marca o sus modelos es un poco incierto, El Lamborghini Countach nos hace imaginar futuros modelos híbridos o eléctricos cuyo diseño haga giños de nostalgia a este ícono de los años 70´s, 80´s y 90´s.