En septiembre pasado, Renault anunció que para 2021, su puesto en la Fórmula 1 sería tomado por Alpine, al histórica marca deportiva que está buscando la forma de hacerse conocida.
Con la campaña 2020 finalizada y el final de la escudería Renault DP World F1 Team, Infiniti anuncia su salida de la categoría, en la que estuvo involucrada los últimos 10 años.
La historia de la incorporación de la marca premium de la Alianza Renault Nissan en la F1 nace hace 10 años, como una forma de darle una base más amplia de conocimiento mundial. Infiniti estaba en fase de expansión a nuevos mercados, pero la dura experiencia que habían tenido marcas similares como Lexus, hizo que los ejecutivos de Infiniti apuntaran a crear una plataforma de caracter global para posicionar la marca.
Los años con Red Bull
La Alianza evaluó que Infiniti se asociará con Renault, que ya actuaba como motorista en la F1, para crear una escudería propia. Los costos de desarrollo y la imposibilidad de garantizar resultados hicieron que finalmente se optara por un vínculo como sponsor comercial de Red Bull Racing en 2011, por entonces, la escudería de moda por sus resultados, y que además era motorizada por Renault.
Ya para 2012 se había convertido en el auspiciador principal del equipo que tenía en sus filas al por entonces bicampeón del mundo, Sebastian Vettel. En cuanto a resultados, fueron cuatro años de ensueño, con títulos en cada uno de ellos.
Durante esos años, Infiniti lanzó al mercado una edición especial del FX denominado Vettel Edition, y en cuyo desarrollo participó el propio piloto, quien había sido nombrado "Director de Performance" de Infiniti. Fue el único provecho real sacado de la asociación con una de las mejores escuderías de la F1, y si consideramos que sólo se fabricaron 150 unidades, el provecho fue más bien poco.
El Infiniti FX Vettel Edition con el propio piloto.
La Vettel Edition destacaba por una estética distinta, mejoras aerodinámicas, nuevas suspensiones, el uso masivo de la fibra de carbono, una reducción importante en el peso, y una mejora en la electrónica y en los escapes para que el mismo V8 5.0 litros generara 420 Hp en lugar de los 390 normales. El 0 a 100 km/h quedaba en 5.6 segundos y la velocidad estaba limitada a 250 km/h.
Nada fuera de lo normal, salvo por el precio: 150 mil euros, el doble de un FX tope de gama.
La era con Renault
Con la introducción de los motores híbridos en 2014, Infiniti presentó el Q50 Eau Rouge Concept, un anticipo a un modelo de calle realmente deportivo trabajado con ayuda de Red Bull Racing. Pero la guerra desatada entre Renault y y la marca de bebidas energéticas por el desempeño de los motores híbridos terminaron por acabar con esos planes y con la asociación.
Para 2015, Renault se estrenó como escudería oficial y se mantuvo como provedor de motores, mientras que Infiniti fue relegado a un plano muy poco relevante en lo visual, aunque colaboró estrechamente en el apartado tecnológico, específicamente en el desarrollo del KERS (sistema de recuperación de energía).
Este sistema KERS fue incluido en el Q60 Black S Concept estrenado a principios de 2017, y que recuperaba la ambición de un verdadero deportivo de la marca. El auto lucía modificaciones estéticas significativas pensando en la eficiencia aerodinámica, montaba un sistema de recuperación de energía derivado del que usaban en la F1 y lo asociaba al motor V6 3.0 biturbo, que gracias a eso podía alcanzar 500 Hp. Lamentablemente quedó sólo en sueños.
Infiniti Q60 Black S Concept.
Ese fue el último intento real de Infiniti por armar una gama deportiva con tecnología de la F1. Luego vino la etapa de la incertidumbre para la marca, del congelamiento de los nuevos desarrollos y de una serie de actualizaciones para mantener la gama activa. Infiniti estuvo 10 años en el gran circo y hoy no tiene nada deportivo para ofrecerle a la gente.
"Esta decisión (salirse de la F1) permitirá a la marca enfocar sus esfuerzos y recursos en convertirse en un competidor relevante en el segmento premium, concentrándose en sus mercados más activos (China y Norteamérica), y en su objetivo de crear soluciones únicas para los vehículos eléctridos deportivos", dice la marca en un comunicado.
Esto significa que Infiniti abandonará aquellos mercados donde no ha logrado cuajar buenos resultados comerciales. Ya se salió de Europa este mismo 2020.