Las autoridades de Estados Unidos han aceptado el principio de acuerdo con Daimler y su filial Mercedes-Benz USA para cerrar el caso del software que alteraba las emisiones de 250,000 vehículos diésel.
Para lograr terminar este litigio con la Agencia de Protección Ambiental (EPA), la Junta de Recursos del Aire de California (CARB), la División de Recursos Naturales y Medio Ambiente del Departamento de Justicia de los Estados Unidos (DOJ), la Oficina del Fiscal General de California y la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de los Estados Unidos, Daimler tendrá que pagar 2,200 millones de dólares.
¿Cómo irá destiando este pago?
Como parte de este acuerdo, Daimler contempla hacer frente a unos gastos de 1,500 millones de dólares en relación con las multas civiles y con los costos relacionados con medidas vinculadas a compensar el impacto sobre el medio ambiente de este caso.
Además, la empresa también estima un impacto de 700 millones de dólares vinculado al costo del acuerdo sobre la demanda colectiva presentada por los clientes afectados en Estados Unidos, cifra que incluye los honorarios de los abogados.
Asimismo, Daimler señaló que estos costos tendrán un impacto sobre el flujo de caja libre del negocio industrial de la compañía durante los próximos tres años, aunque el principal efecto se notará en los próximos doce meses.
Dentro del acuerdo y de forma adicional a las multas civiles, Daimler tendrá que gastar 875 millones de dólares en acciones orientadas a mejorar el sistema de cumplimiento de la empresa y para poner en marcha un programa de modificación de las emisiones de algunos modelos diésel.
Por último, la compañía alemana también llevará a cabo medidas de mitigación en Estados Unidos y además ofrecerá financiación para otras iniciativas de reducción de emisiones de óxidos de nitrógeno (NOx) en California.