A pesar de que el gobierno federal anunció que empresas del ramo automotriz, ya pueden iniciar operaciones el 1 de junio (y unos días antes también para la preparación de la producción), cumpliendo con todos los protocolos de cuidado y sanitización, los cuales Volkswagen ha ejecutado a detalle, el gobierno de Puebla se niega a permitirle al fabricante alemán a retomar actividades porque según él las medidas tomadas no son suficientes.
Volkswagen de México, ha tomado 100 acciones de prevención e higiene para el regreso paulatino de operaciones en sus complejos de Puebla, donde manufactura vehículos Audi así como la marca de Wolfsburg. Con estas medidas se pretende proteger a los empleados y darles un ambiente seguro para laborar, evitando con esto la propagación del COVID-19.
El gobierno de Puebla, afirma que las condiciones tomadas por Volkswagen, no son la suficientes para superar la crisis de la pandemia en el estado.
Por su parte, Volkswagen respeta la decisión del gobierno estatal y anuncia que por el momento no hay fecha confirmada para el reinicio de la producción en sus plantas, hasta que las circunstancias cambien y el decreto emitido por el Estado de Puebla deje de tener efectos.
Entretanto, la cadena de suministro para la manufactura de autos y los clientes de diversos componentes como productos tanto en México como en el extranjero, de Volkswagen, se encuentra severamente afectada.