Crónica de una muerte anunciada. Cliché, pero es la verdad, la venerable Mitsubishi Montero (o Pajero) está viviendo en tiempo prestado. Tras 37 años, nos apena tener que despedir a un modelo que, en su larga historia, ha sido exitoso y reconocido.
Si bien en Europa, ya comenzaron a salir algunos modelos con la etiqueta de Final Edition, es en Japón, su matriz, donde finalmente se le dará un adiós oficial. La fiebre por vehículos ecológicos, ha sido parte de lo que ha hundido a la Montero, aparte claro, de los problemas que Mitsubishi ha tenido que enfrentar económicamente hablando. De hecho, esta cuarta generación, extendió su vida por más de 10 años, siendo lanzada el 2006.
Solo 700 unidades finales se fabricarán del Montero/Pajero, en su versión Exceed tope de gama, más algunos accesorios que fueron populares como opcional. Esto incluye las extensiones de las salpicaderas, spoiler, barras en el techo, tapa para la rueda de refacción, asientos eléctricos en piel café y estribos iluminados. Aparte -claramente- de las insignias conmemorativas, Mitsubishi regalará con cada unidad, un reloj Citizen grabado especialmente para la ocasión.
Sin embargo, todos sabemos lo que pasa cuando una marca señala el fin de un modelo; nunca es completamente cierto, y es que Mitsubishi, aunque despide al Montero en Japón, en otros mercados aun seguirá comercializándose, siendo fabricado en la legendaria planta japonesa de Gifu. Aunque claro, estamos hablando -nuevamente- de tiempo prestado, ya que no sabemos que tanto aguanten las exportaciones. Mitsubishi ha producido más de tres millones de unidades para 70 diferentes mercados, de los cuales 640 mil se han vendido en Japón, aunque en marzo del presente año, solo se vendieron 89 unidades puntuales.
Junto con el Land Cruiser, el Pajero/Montero es uno de los 4x4 más reconocidos de Japón, en especial durante aquella era en que fueron un boom emergente en todos lados, notando que un vehículo utilitario, podía también ser cómodo para la familia y actividades recreativas. Aunque claro, esto se fue de las manos y hoy las SUV han dado pie a una plaga de crossovers de la que no nos vamos a librar en un buen tiempo. Otros notables ejemplos contemporáneos, son el Range Rover clasico y el Jeep Grand Cherokee, de mayor lujo, pero con la misma idea.
Aparte, claro, están sus credenciales deportivas. 12 triunfos en el Dakar, incluyendo siete consecutivas, son garantía más que absoluta de su calidad y aptitud off-road.
¿Qué dice el futuro? Así como ocurrió con otro caído de la firma de los diamantes, el Lancer Evolution, se rumoreaba que podría volver con un tren motriz híbrido-enchufable, pero mientras no haya nada confirmado, no podemos asegurar nada.