Un repaso a través de sus generaciones…
La primera vez que esta SUV vio la luz en el año de 1983, cuando la división de vehículos de lujo de Honda tomó al Isuzu Trooper para comenzar a comercializarlo como un modelo propio al que denominó como Acura SLX, éste se mostraba como una versión renovada y mucho más ligera del SUV japonés.
A inicios de los años 2000 Acura cambió el nombre de SLX a MDX, como una renovación de la marca que representaría un cambio generacional para la mayoría de su catálogo de productos, mostrando un lenguaje de diseño con mira hacia el futuro entrado el nuevo milenio.
La segunda generación llegó hasta el año 2007, cuando la firma nipona actualizó el producto para darle un aspecto más atractivo, éste incorporaba un tren motriz de seis cilindros y 3.5 litros asociado a una caja automática de cinco relaciones, mismo que no ha cambiado de forma drástica para la más reciente generación.
Como los buenos vinos, entre más pasa el tiempo, luce mucho mejor…
En el frontal ya notamos ese espíritu deportivo, pues este lavado de cara mantiene el lenguaje de diseño adoptado hace algunos años, pero se ve mejorado con la introducción de la variante A-Spec, que solo vestía a modelos como ILX y TLX. Posee una parrilla de tipo diamante con un grupo óptico LED, que la marca denomina como Jewerly Eye. Además, esta versión adiciona quemacocos, alerón, difusor y doble salida de escape deportivo, así como nuevo juego de rines de 20 pulgadas.
En el interior de esta versión notamos que prevalece el color rojo para los asientos forrados en alcántara y demás detalles, también encontramos insertos en simulación de fibra de carbono, elementos empleados en diversos vehículos deportivos de diferentes marcas para ofrecer ese aspecto entusiasta que a muchos nos atrae.
Los asientos son calefactables y si así lo deseas también se ofrece la opción de vestiduras en piel para la versión Tech, que se posiciona como la de entrada. La gama de colores se amplía, aunque no demasiado, con posibilidad a elegir entre una carrocería negra, blanca, gris o plateada.
Impulsado por un corazón de seis cilindros…
Como lo comentaba anteriormente, continúa impulsándose por un bloque de seis cilindros de 3.5 litros, capaz de generar 290 caballos de fuerza y 267 Lb-pie de torque, acoplado a una caja automática de nueve relaciones y sistema de tracción integral inteligente (SH-AWD) desarrollado por Acura. Ambas versiones incorporan tres modos de manejo: Comfort, Normal y Sport, en donde esta última, naturalmente, hace más ronco el rugido del motor.
En cualquiera de las versiones suplimos la palanca de velocidades por el sistema Shift By Touch, desde donde podremos manipular los cambios correspondientes, esta tecnología ya se había visto en otros modelos de la marca, así como en algunas opciones del catálogo de Honda, como claro ejemplo tenemos a la Odyssey, que ya suple la tradicional palanca por botonería. Aunque si no estás muy contento con eso y posees un espíritu más entusiasta, también podrás hacer uso de las paletas de cambio, localizadas detrás del volante, y así manipular la potencia del vehículo a tu preferencia.
Muy bien equipada…
Con el fin de viajar siempre de manera confortable, la MDX incluye un sistema de info-entretenimiento de ocho pulgadas compatible con Apple CarPlay o Android Auto, además de un sistema de entretenimiento plegable de nueve pulgadas para que los habitantes de plazas posteriores puedan disfrutar de una película durante el trayecto mediante transferencia de sonido con audífonos inalámbricos.
También cuenta con una pantalla inteligente Multi-información (i-MID) y navegador. El sistema de audio digital está a cargo de la empresa Panasonic en conjunto con el productor Elliot Scheiner, integrando un total de diez bocinas para una mejorada experiencia de sonido envolvente.
Toda la farmacia de seguridad…
Como parte fundamental, Acura incluye el conjunto de tecnologías de seguridad y asistencia denominadas como AcuraWatch, estas incluyen alerta de cambio de carril, advertencia de colisón frontal, asistencia para permanencia dentro del carril, sistema de monitoreo de puntos ciegos, sistema de prevención de colisión trasera, control crucero, cámara de reversa, sin dejar de lado el sistema de frenos ABS, control de estabilidad, asistente de arranque en pendientes y un total de siete bolsas de aire y control de estabilidad y tracción.
Manos al volante…
Aunque tuve la oportunidad de asistir a la presentación oficial que lamentablemente fue estática, era obvio que necesitaba sentir toda esa potencia y experiencia de conducción más allá de solo saber las especificaciones, pues a simple vista es una SUV que te incita a manejarla. Y es extraño, ya que, muchos de ustedes saben que no me inclino tanto por una camioneta, pero vaya que en estos últimos años me han sorprendido bastante todas las propuestas que conforman a este competido segmento.
Primero que nada, debo decir que es muy confortable, pues tuve la oportunidad de convivir con ella una semana, para realizar mis trayectos diarios que simple y sencillamente van de ir de mi casa a la oficina y viceversa, pero eso no es reto, lo divertido viene cuando les digo que este traslado es uno de los más complicados en cuanto a tránsito se refiere, pues debo circular por periférico de sur a norte y de norte a sur todos los días.
El día de la sesión fotográfica, pude sacarle un poco más de jugo a esta camioneta realizando un traslado a un pueblo muy cerca de Pachuca, en donde la puesta a punto me sorprendió, al punto que el acrónimo “mama van” desapareció por completo de mi cabeza, era como tener un deportivo con motor naturalmente aspirado, pero con un centro de gravedad mucho más alto.
La aceleración es lineal y la caja de cambios responde de manera efectiva ante la exigencia de potencia, pero ojo, tampoco te emociones tanto pues debes tomar en cuenta que este vehículo pesa casi dos toneladas, 1,936 kg, para ser exactos.
Planea adecuadamente, y en ningún momento se siente alguna sensación de subviraje ni coleo, pues el sistema de tracción Super Handling All Wheel Drive ayuda mucho al tomar una curva a medianas o altas velocidades, pues este sistema mide el ángulo de giro para ejercer el torque necesario a las ruedas que lo requieran para agilizar la maniobrabilidad en curvas.
La suspensión es independiente y hace su trabajo de buena manera, pues absorbe de manera correcta las imperfecciones del camino, logrando hacerlas lo más imperceptibles posible, aunque en una ciudad como en la que vivimos sabemos que eso no es tarea fácil. Los frenos actúan conforme a lo planeado, y no hace falta ejercer mucha presión sobre el pedal para sentir como el vehículo inicia su proceso de desaceleración.
Rendimiento
Hablando del rendimiento, esta SUV se comporta de buena forma pues nos ofrece un consumo de 8 km/l en ciudad bajo una situación de transito moderado a pesado, manteniendo, por obvias razones, un hábito de manejo relajado, mientras que, en carretera, es capaz de ofrecernos 12 km/l, una cifra nada despreciable dados los 300 caballos de potencia que ofrece. La capacidad del tanque es de 73 litros, por lo que si hacemos un par de cuentas rápidas tenemos que con aproximadamente $1,500 pesos podríamos llenar el tanque a su máxima capacidad.
Conclusiones
En general el producto está muy bien logrado y cumple con las expectativas, pues si, se maneja como se ve, e incluso las supera en función de que pareciera no percibirse el estar a bordo de una camioneta de tan grandes dimensiones. Es una SUV balanceada en temas de equipamiento, seguridad y desempeño, pues tiene todo con que ser un digno competidor dentro de su segmento. El manejo es preciso, la dirección apunta bien y es realmente cómoda para llevarla a realizar trayectos largos. Lo único que no me gustó fue el sistema de info-entretenimiento pues con toda esta tecnología, Acura pudo hacer un esfuerzo más por ofrecer una pantalla de mejor calidad y una consola central mucho más atractiva, eso solo en temas de diseño pues en cuanto a funcionalidad, no le veo mayor problema.