Lance Stroll, el jóven piloto de Williams, no está pasando un buen presente en la F1. La escudería británica está lejos de sus mejores épocas, marcha última en el serial y hasta ahora tuvo un 8º puesto en Azerbaiyán como su resultado más destacado en lo que va de 2018.
Por esa razón, el padre de Stroll, Lawrence, decidió dejar de pagar los 30 millones de euros que aporta a Williams para pasar a invertir en Force India. Así, todo indica que el joven Lance tendría un monoplaza rosado con su nombre en 2019. El que se mantiene en la escudería asiática sería Checo Pérez, mientras que Esteba Ocon se mudaría a Renault.
Esta información fue publicada por el medio alemán Auto Motor und Sport. Lawrence Stroll, además del ser el padre de Lance, es un coleccionista de Ferrari e inversor, rankeado como el 722º más rico del mundo por la revista Forbes, con una fortuna de 2,400 millones de dólares.
Lance Stroll, por su parte, comenzó su carrera en los kárts, para luego pasar a la Academia de Ferrari. Participó de la Formula 3 y fue piloto de pruebas de Ferrari en 2015 y de Williams en 2016. El año pasado debutó para esta última, consiguiendo un 3º puesto en Azerbaiyán como mejor resultado, convirtiéndose en el más joven en llegar al podio en su temporada de début de la historia de la F1.