Como parte de su proyecto piloto de conducción autónoma, Uber lleva a San Francisco, California (Estados Unidos), un cierto número de unidades del Volvo XC90 dotados de tecnología que permiten transportar personas sin la necesidad de un chofer.
Recapitulando, en agosto de 2016 Volvo y Uber crearon una alianza para crear vehículos que puedan utilizarse como base para desarrollar automóviles totalmente autónomos. Este trabajo en conjunto permitió que las primeras pruebas se realizaran hace unos meses en Pittsburgh, Pensilvania.
Ahora, este programa piloto de vehículos autónomos de Uber que es llevado a San Francisco realiza pruebas con el Volvo CX90 dotado de un paquete de hardware y software de conducción autónoma desarrollado por la propia empresa californiana. No obstante que estos vehículos pueden circular de forma independiente siempre habrá a bordo un técnico de Uber para inspeccionar su actividad.
Es un hecho que una vez que esta tecnología esté implementada al 100 por ciento, Uber verá un incremento en las ganancias al prescindir de los choferes, al mismo tiempo que se verá incrementada la seguridad vial. Sin embargo, viéndolo desde otra perspectiva esta es una mala noticia debido a que muchas personas se quedarán sin trabajo.
Uber realiza pruebas de conducción autónoma en San Francisco
