Para elevar sustancialmente la potencia de este Toyota 86, StreetFx Motorsport decidió hacer a un lado el motor bóxer de 2.0 litros para instalar el V6 twin-turbo del Nissan GT-R.
Debido a que las dimensiones del bloque del Godzilla son mayores en comparación con el FA20 Boxer desarrollado por Subaru, los ingenieros tuvieron que instalar un sistema de cárter seco, que elimina 150 mm en el borde del motor seis cilindros.
Pero las modificaciones no quedaron ahí. Además de lo anterior, el motor VR38DETT fue dotado de cilindros más grandes por lo que la capacidad del motor fue llevada de 3.8 a 4.1 litros. Igualmente obtiene un nuevos turbos, cigüeñal, bielas, intercooler y parrilla.
Por último, este auto con más de 1,000 hp destinado a las competencias de drifting obtiene un kit aerodinámico, un capó de fibra de carbono, una nueva suspensión, un diferencial trasero de Ford y asientos racing.